"La IFAB está investigando 25 aspectos del juego intentando convertirle en algo más justo y las infracciones por mano es uno de ellos. Una de esas áreas que valoramos son incidentes similares a la mano que hizo Luis Suárez en la Copa del Mundo de 2010", reflexionó David Elleray, director técnico de la IFAB.
En aquella cita mundialista, una mano del delantero uruguayo del FC Barcelona evitó el tanto de Ghana y prácticamente su billete a semifinales, y aunque el delantero fue expulsado, Gyan falló la pena máxima y finalmente el combinado africano fue eliminado en la tanda de penaltis. "Mucha gente opinó que en esa clase de incidentes, debe darse gol si se aprecia claramente que el balón va a entrar", insistió Elleray.
Esta nueva práctica, que ya resultó determinante el pasado martes en el amistoso entre Francia y España al anular por fuera de juego un tanto del delantero colchonero Antoine Griezmann y, por el contrario, para dar validez al de Gerard Deulofeu, será puesta a prueba durante el próximo Mundial que se celebrará en Rusia en verano de 2018.
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