Kenia e Ibargüen brillan en apertura de Liga de Diamante en Doha

Kenia brilló en las pruebas de medio fondo masculino (1.500 metros y 3.000 metros obstáculos) en la etapa de apertura de la Liga de Diamante de atletismo, este viernes en Doha, marcada por doce mejores marcas anuales, entre ellas la de la colombiana Caterine Ibargüen en triple salto (15,04 metros).

Invicta desde su medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Londres, el 5 de agosto de 2012, Ibargüen superó en la ciudad catarí a otra sudamericana que apunta alto, la venezolana Yulimar Rojas (14,92 metros), que en marzo se proclamó campeona del mundo en pista cubierta en Portland (Estados Unidos).

Ibargüen, campeona del mundo al aire libre en 2013 y 2015, entra con buen pie en el circuito de la Liga de Diamante, donde defiende su corona, y continúa sumando éxitos de cara a los Juegos Olímpicos de Rio.

La campeona olímpica de Londres, la kazaja Olga Rypakova, finalizó tercera este viernes (14,61 metros).

Entre los kenianos, el triple campeón mundial Asbel Kiprop dominó el 1.500 metros (3:32.15), por delante de tres de sus compatriotas y ante la mirada del británico Sebastian Coe, dos veces campeón olímpico de la distancia (1980, 1984) y actualmente presidente de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF).

Una mirada que era también escrutadora y vigilante: Kenia está bajo observación especial por parte de la IAAF y la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), lo que hizo temer por momentos que el país fuera a seguir el mismo camino que Rusia, que está actualmente suspendida de las competiciones internacionales.

Kenia destacó todavía más en los 3.000 metros obstáculos, su prueba emblema. Sólo el bahreiní, aunque de origen keniano, John Koech se intercaló (4º) entre ocho atletas que representaban al país africano. Conseslus Kipruto, ya dos veces subcampeón mundial con apenas 21 años, se impuso con un tiempo de 8 minutos, 5 segundos y 13 centésimas.

En la velocidad, la batalla fue muy diferente.

La holandesa Dafne Schippers y la estadounidense Tori Bowie, plata y bronce en los 100 metros en el Mundial de Pekín-2015, llegaban como favoritas.

Bowie fue la ganadora con un crono significativa a estas alturas tempranas de la temporada (10.80), igualando su mejor marca personal, mientras que Schippers se quedó en 10.83.

"Quedé cerca de mi récord personal (10.81), pero mi salida fue mala", estimó Schippers, de 23 años. Campeona mundial de 200 metros en Pekín, la velocista holandesa sólo lleva dos años dedicada por entero al esprint, después de haber brillado en las pruebas combinadas.

Como Ibargüen y Kiprop, otros campeones del mundo destacaron en Doha.

Fue el caso por ejemplo del discóbolo polaco Piotr Malachowski (68,03 metros) o el estadounidense Christian Taylor en el triple salto (17,23 metros).

La sudafricana Caster Semenya, controvertida campeona del mundo en 2009 en los 800 metros por las dudas sobre su sexo, se impuso en la doble vuelta de pista (1:58.26).

"Cualquier tiempo bajando de dos minutos me satisface. Es el resultado del trabajo. Además, he sabido tener paciencia con mis problemas de rodilla", explicó Semenya, de 25 años.

En casa, el saltador de altura Mutaz Barshim terminó apenas séptimo con 2,26 metros. En el Mundial en pista cubierta de marzo fue cuarto, en un año en el que ha cambiado de táctica.

"El pasado año estuve en forma demasiado pronto y en julio ya estaba muerto (fue cuarto en el Mundial de Pekín en agosto). Tengo que evitar cometer el mismo error. Prometo a mis fans que no les decepcionaré en Rio", apuntó.

De vuelta al estadio donde hace un año sufrió una grave lesión en el tendón de Aquiles, el francés Teddy Tamgho sólo pudo ser séptimo en el triple salto (16,54 metros).