Un Nadal épico pierde el bronce ante Nishikori y los elementos

Rafa Nadal se queda sin bronce. Una verdadera pena ya que hubiera sido un precioso broche final a estos Juegos en los que el español nos ha deleitado con su furia y golpes ganadores que nos han recordado al tenista que fue número uno en dos ocasiones. El de Manacor se merecía una tercera medalla después del oro en dobles junto a Marc López y el de Pekin en 2008 en individuales. 

Sin embargo el maratoniano calendario no le ha dejado disputar en condiciones la medalla de bronce. Menos de 24 horas después de disputar un partido agónico ante Del Potro de más de tres horas de duración saltaba a la pista ante el japonés Nishikori, mucho más fresco tras perder en una hora y veinte minutos contra Murray, y sin el desgaste que ha sufrido nuestro jugador por el torneo de dobles. En total han sido veinte horas en siete días. 

Con este panorama el primer set no dio para mucho. El japonés se adjudicó el primer set por 6-2 con dos breaks y ganando sus saques con mucha facilidad. Rafa no le inquietó y no dispuso de ninguna bola de break. Cansado de piernas el español cometió muchos errores y cuando no tiraba la bola fuera la dejaba a media pista para que el jugador japonés dominara a placer el encuentro. Sin embargo el partido deparaba un giro inesperado. 

El segundo set comenzó de forma similar aunque se veía a un Rafa distinto que poco a poco entraba en el partido. Le pegaba más y mejor. Y además estaba más rápido de piernas. Sin embargo el resultado se le puso en contra como en el primer set. Dos breaks para Nishikori y 5-2 de ventaja. En esta ocasión Nadal dio más guerra e inquietó más al nipón que tuvo que salvar varias pelotas de rotura. Incluso con 5-2 y un set en contra el español no dio nunca por perdido el encuentro. Tanto que levantó la ventaja y llegó a empatar a 5. 

Con un Rafa enchufado el partido llegó al tie break. En ningún momento el japonés llegó a tener punto de partido. En el desempate el jugador nipón desapareció y Rafa se lo llevó fácil por un 7-1. El partido se iba al tercer set. El parón de Nishikori

Cuando mejor estaba Rafa y cuando peor estaba Key hubo un parón por parte del japonés que pareció desestabilizar al español. Fueron diez minutos eternos para Nadal y para los espectadores que abuchearon al japonés cuando volvió a la cancha.  

Rafa ya no era el mismo. Volvía el Nadal fallón del primer set, que además discutía con el árbitro Bernardes. Un árbitro con el que Rafa no se lleva bien y que paraba el partido constantamente, algo que desesperaba al español. 

Al español, cansado mentalmente y sobre todo físicamente, no le vino bien el parón. Y tampoco cabrearse con el árbitro y con el japonés, que le llegó a mandar tres bolas al cuerpo. Algo válido pero no muy limpio. Como la desaparición de diez minutos. "Me voy a tomar una Coca Cola si no hay tiempo", la he dicho Nadal al árbitro, sensiblemente enfadado. 

Así las cosas el japonés rompió el saque del español en el cuarto juego y consolidó el break con su saque para ponerse 4-1. Rafa aguantó y tuvo opciones con 30 iguales para devolverle el break en los saques posteriores de Nishikori. Pero esta vez no hubo milagro. El japonés cerró su saque y se adjudicó el partido por la medalla de bronce por 6-2, 6-7 y 6-3. Es el primer nipón en lograr una medalla olímpica en tenis.