A Capello le salen mal (casi) todas sus pruebas en su estreno mundialista

Fabio Capello, que está cerca de cumplir 66 años y tiene un palmarés a sus espaldas que está repleto de títulos y galardones, sólo había visto los mundiales por la tele. Nunca había acudido a uno como responsable de alguna selección. Para su estreno tenía una difícil papeleta: un rival complicado y traicionero como Estados Unidos, a priori inferior por historia, pero que mantiene una evidente progresión en juego y resultados en los últimos años.

Su primer once titular en Sudáfrica era muy esperado por las novedades que podría introducir, las decisiones respecto a algunos jugadores cuestionados, y su elección en la portería.

Lampard – Gerrard. Los dos mejores centrocampistas de Inglaterra son clones, pero lejos de sumar sus fantásticas cualidades, las que cada fin de semana deslumbran en la Premier League, se restan cuando juegan juntos. Capello optó por alinearles en el centro del campo inglés, siendo los elegidos de dar sentido al juego, y el rendimiento que ofrecieron fue de más a menos, terminando en un rotundo fracaso. El jugador del Liverpool anotó el gol inglés, al poco de comenzar el encuentro, y el tiempo que le duró la gasolina regaló trabajo y llegada. El del Chelsea estuvo muy por debajo de su nivel, apenas apareció, falló pases fáciles y apenas creó peligro.

Green. El eterno debate sobre quién debe ser el portero titular de Inglaterra tiene carrete para varias semanas más gracias al gravísimo error del portero del West Ham. Capello optó por Green como titular en lugar de James o Hart, y peor no le pudo salir la apuesta. En un tiro lejano de Dempsey, sin mucha fuerza y sin haber tocado en nadie, el guardameta inglés no fue capaz de atrapar el balón y permitió que éste se colara en el fondo de su portería, en lo que era el empate norteamericano. La desgracia jugada entrará en la historia como uno de los fallos más graves de los Mundiales.

Milner. El técnico italiano dio entrada en la banda izquierda al jugador del Aston Villa, pero apenas le mantuvo media hora sobre el terreno de juego. El tiempo suficiente para que ver unatarjeta amarilla y ser superado varias veces por el lateral norteamericano Cherundolo. Le cambió por Wright-Phillips

Heskey. Que el veterano delantero nacido en Leicester siga siendo el delantero titular de Inglaterra no es una buena noticia para los pross. Nunca ha sido un jugador 'top', pero con ya 32 años, sus carencias son más evidentes. Heskey aporta trabajo y pelea con los centrales, pero nunca fue un delantero goleador, nunca fue un matador. Y eso se vio perfectamente en la segunda parte, cuando tuvo la oportunidad de dar la victoria a los suyos con un mano a mano con Howard que desperdició disparando al cuerpo del portero norteamericano.