La eliminatoria entre el Atlético y el Bayern pasó a ser para muchos un duelo entre los 'cholistas' y los 'guardiolistas'. Todo el mundo esperaba el duelo entre los dos mejores técnicos en la actualidad. Porque Simeone y Guardiola están los más alto enfocando el fútbol desde un diferente prisma. Ambos representan dos estilos antagónicos en el fútbol. Uno busca dominar el juego sin tener el balón y otro considera imprescindible el esférico para gobernarlo todo. Y ganó el primero.
Tras el partido de ida, el director de Sky Sport Italia, Fabio Caressa criticó con dureza a Simeone y su equipo: "¡El juego del Atlético da asco! Y lo debemos decir con mucha claridad". La Gazzetta dello Sport respondió con una potada que dio la vuelta al mundo son El Cholo convertido en el Che Guevara: "Comandante Simeone. El Cholismo es la revuelta contra el tiqui taca".
Después fue Xavi el que pasó al ataque: "Un equipo grande no puede jugar como el Atlético de Simeone". El español encontró respuesta en Trapattoni: "Simeone me encanta. No me haga decir nombres, pero hay equipos que tocan el balón durante media hora sin tirar nunca... ¡yo con esto me duermo!": Gattuso puso la puntilla: "El Barcelona y Pep Guardiola han creado monstruos en la sociedad y en los entrenadores".
En la rueda de prensa previa a la vuelta, Simeone fue cuestionado por todas estas declaraciones y no dudó en la respuesta: "Lo único que me importa es ganar y para eso me preparo, no me preparo para agradar a los demás". En el campo volvió a demostrarlo.
Las estadísticas dicen que el Atlético de Madrid no llegó a alcanzar el 30% de la posesión de balón desde los cuartos de final: ni ante el Barcelona ni ante el Bayern, ni en la ida ni en la vuelta. Atletico's possession in each game since the 1/4 finals:
25.7%
22.9%
26.2%
27.6%— David Wall (@1DavidWall) 3 de mayo de 2016
Curiosamente fue en Múnich cuando tuvo la cuota más elevada, alcanzó el 27,6% gracias a los espacios que encontró en la segunda mitad. Desde los cuartos de final, el partido de vuelta ante el Barcelona fue cuando menos tocó el balón y curiosamente ganó 2-0.
La posesión media de estos cuatro partidos es de solo el 25,6% para el Atlético. Esto demuestra que todos los caminos en el fútbol conducen hacia la victoria si se ejecutan de la forma adecuada. Entonces, ¿qué significa jugar bien y jugar mal?
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