Brasil y Rusia a un paso de la gloria en voleibol

  • Brasil y Rusia están a un paso de la gloria en voleibol y mañana jugarán por la medalla de oro de los Juegos Olímpicos de Londres para alargar el palmarés de dos de los países más laureados de este deporte.

Londres, 11 ago.- Brasil y Rusia están a un paso de la gloria en voleibol y mañana jugarán por la medalla de oro de los Juegos Olímpicos de Londres para alargar el palmarés de dos de los países más laureados de este deporte.

Rusia es la selección con más medallas olímpicas en voleibol, si se cuentan las de la época soviética: se adjudicó el oro en Tokio 64, México 68, Moscú 80, además de tres platas y tres bronces. La última vez que se subió al podio, fue en Sídney 2000.

Brasil es la primera selección en alcanzar tres finales olímpicas seguidas, después de su plata en Pekín y su oro en Atenas, que se suman al oro logrado en Barcelona 1992.

La selección dirigida por Bernardo Rezende "Bernardinho" es, con mucha diferencia, la más laureada de la última década y desde que este entrenador asumió las riendas del equipo en 2001, ha ganado tres Mundiales y ocho Ligas Mundiales, además de los éxitos olímpicos ya mencionados.

Bernardinho opinó este viernes, al certificar la clasificación a la final, que la selección merece ser "reverenciada" por haber mantenido un alto nivel competitivo durante tanto tiempo.

Algunos jugadores de esta generación dorada se jubilaron después de Pekín y otros míticos, como Giba o Ricardinho, han tenido poco protagonismo en estos Juegos, en detrimento de nuevos talentos más jóvenes.

El juego de la "verde-amarilla" recae ahora en el colocador Bruno, hijo de Bernardinho, que ha crecido durante la competición y contra Italia, en las semifinales, realizó un gran partido y fue responsable de la velocidad y la versatilidad del equipo.

Brasil cuenta con Murilo, un jugador polivalente y experimentado que se echa el equipo a la espalda cuando más lo necesita, con uno de los mejores líberos del mundo, Serginho, de 36 años, y también con una joven hornada de atacantes muy altos y potentes, que han aportado músculo.

Esos centímetros de más serán esenciales mañana si Brasil pretende parar a un gigante como Muserskiy, de 2,18 metros, y a Mikhailov, el máximo anotador de los Juegos con 131 puntos, una exageración si se compara con el mejor puntuador de Brasil, Murilo, que solo sumó 81 tantos.

Ambas selecciones ya se han enfrentado en los Juegos, en la primera fase. Entonces Brasil ganó por 3-0, en un partido con fuerzas muy parejas que se decantó del lado de los suramericanos en los puntos decisivos de cada set.

Bernardinho ha alertado que Rusia ha mejorado a lo largo de la competición, aunque el propio Brasil también se encuentra más cómodo en la cancha y, a cada día que pasa, parece que derrota a sus rivales con más solvencia y menos apuros.

Rusia alcanzó la final después de derrotar a Bulgaria por 3-1, mientras que Brasil aplastó a Italia en la semifinal por 3-0, con un parcial espectacular de 25-12 en el segundo set.

La final, que enfrenta a las dos selecciones mejor colocadas en la clasificación mundial, se jugará a las 13.00 hora local (12.00 GMT) en el pabellón Earls Court.

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