Cech, la llave mágica de la puerta de la República Checa

Gustavo Monge

Praga, 4 jun.- El guardameta Petr Cech es la gran estrella del combinado checo, y su solidez bajo los palos se puso una vez más de manifiesto en la final del Liga de Campeones, siendo uno de los hombres clave que permitieron al Chelsea alzar el trofeo.

Después del partido, Cech declaró que había estudiado todos los lanzamientos de penalti efectuados por el Bayern de Múnich en el último lustro.

Lo cierto es que atajó la pena máxima lanzada por su excompañero de escuadra Arjen Robben en la prórroga y, tras acabar el partido en empate, adivinó la dirección de los lanzamientos en la "muerte súbita" que cerró la disputa del máximo trofeo continental de clubes.

Paró el disparo del croata Ivica Olic y desvió al poste el tiro con "paradinha" de Bastian Schweinsteiger, poniendo en bandeja la victoria a los azules, lo que fue aprovechado por Didier Drogba para colocar el 3-4 definitivo.

Fue el mejor regalo de cumpleaños del cancerbero checo, que cumplió 30 años el día después de la final de Munich, y su nombre fue aclamado por las calles de Londres.

La "Torre" checa, que mide 1,96 metros y debutó hace diez años con la selección, ha ganado en su país siete veces el "Balón de Oro", un galardón que otorga la prensa deportiva y que supone un récord en la historia del certamen, colocándose por delante de exjugador de la Juventus Pavel Nedev, que lo obtuvo seis veces.

Está considerado uno de los más grandes porteros del mundo, habiendo sido tres veces ganador del premio al mejor portero de la UEFA Champions League, una vez de los Guantes de Oro de la Premier League, y una vez el Mejor Portero del Mundo, según la Federación Internacional de Historia y Estadística de Fútbol (FIHEF).

Desde el 20 de enero de 2007 aparece en los campos con un casco de rugby para proteger su cabeza, ya que tres meses antes había sufrido una fractura de cráneo durante un encuentro liguero en Inglaterra.

La última temporada que Cech jugó en un equipo checo fue la 2001-2, donde coincidió en el Sparta de Praga con el otro icono de la selección y capitán, Tomas Rosicky.

Rosicky es un prodigio con el balón, aunque tuvo a comienzos de 2008 una complicada lesión en una rodilla y en los isquiotibiales de la misma pierna que le mantuvieron alejado de los terrenos de juego durante año y medio.

No pudo jugar la Eurocopa de Austria y Suiza (2008), y desde entonces sólo ha podido cuajar una buena temporada en la presente edición de la Premier League, donde los "Gunners" quedaron en tercer lugar y con posibilidades de acceso de la Liga de Campeones.

Con todo, Rosicky es pieza indiscutible en el esquema de juego del técnico Michal Bilek, con su fútbol desestabilizador.

Poco antes de la salida para la concentración en Graz (Austria), el jugador avisó que se demoraría por unos dolores en el músculo peroneo.

Sufrió una lesión durante el último duelo liguero, frente al West Bromwich Albion, por lo que fue sustituido al medio tiempo.

"No debería ser nada serio. He superado unos exámenes y lo importante es que no tengo rotura en la fibra muscular. He tenido una semana de reposo total y ahora se trata de que poco a poco vuelva al ritmo de los entrenamientos", dijo Rosicky al llegar a Praga.

El centrocampista ofensivo del Arsenal, de 31 años, es el segundo anotador del equipo absoluto, con 20 dianas en 85 partidos internacionales, sólo por detrás del ariete Milan Baros.