El británico Coe (58 años), campeón olímpico de 1.500 metros en Moscú-1980 y Los Ángeles-1984, y el ucraniano Bubka (51), oro en Seúl-1988 y seis veces campeón del mundo de pértiga, son dos titanes acostumbrados a la victoria, pero esta vez solo habrá un ganador en el Congreso de la IAAF.
La lucha se anuncia igualada para suceder al senegalés Lamine Diack, de 82 años, que era presidente del organismo desde 1999.
La elección llega en un momento en el que atletismo se encuentra en el ojo del huracán, tras las acusaciones de dopaje lanzadas por la cadena alemana ARD y el diario británico Sunday Times.
Según estos medios, que se apoyan en 12.000 análisis sanguíneos provenientes de una base de datos de la IAAF, un tercio de las medallas mundiales y olímpicas del mediofondo hasta el maratón entre 2001 y 2012 presentarían valores sospechosos. Rusia y Kenia son países especialmente señalados en este reportaje.
Ambos candidatos, que presentan programas muy similares, ponen como primer objetivo de su eventual mandato luchar contra el dopaje y potenciar el atletismo a nivel económico y de márketing.
Coe, al que su buena labor al frente de la organización de los Juegos Olímpicos de Londres-2012 podría darle alguna ventaja, defiende la creación de un organismo de lucha contra el dopaje en el seno de la propia IAAF.
El miércoles en Pekín votarán las 214 federaciones nacionales afiliadas a la IAAF y el voto de pequeñas islas caribeñas, como Anguila, de una población de 1.600 habitantes, tendrán el mismo valor que el de China o Estados Unidos.
Aunque Lamine Diack quiere mantenerse neutral y afirma no decantarse por ninguno de los candidatos, parece más cercano a Bubka, que contará con la mayoría de los votos de los países africanos.
Para el ucraniano éste será el segundo intento a la presidencia de un organismo deportivo importante, tras haber sido derrotado por el alemán Thomas Bach en la elección de 2013 a la presidencia del Comité Olímpico Internacional (COI).
El vencedor en la elección del miércoles, gobernará la IAAF durante los próximos cuatro años.
Ambos han puesto la lucha contra el dopaje como su mayor objetivo, aunque saben que deben ganar votos con un programa atractivo también en otros aspectos.
"Mi gran objetivo es hacer crecer al atletismo, hacer nuestro deporte aún más global y más exitoso comercialmente", señala Sebastian Coe.
"Con un análisis apropiado podemos incrementar los ingresos en todo el mundo. Espero haber demostrado, particularmente durante mi período como responsable de los Juegos de Londres-2012, que poseo las cualidades y la energía para lograr un éxito comercial de nuestro deporte en todo el planeta", añade el británico.
Bubka, en su programa "Llevando al atletismo a nuevas alturas", en un guiño a su pasado como pertiguista, disciplina en la que batió el récord mundial 35 veces en su carrera, quiere potenciar su deporte entre la juventud.
"Es un hecho desgraciado que los jóvenes no están comprometidos en nuestro deporte como lo estuvieron en el pasado. Aunque ello representa una seria amenaza para el futuro del atletismo, debemos pensar también que es un desafío para crecer. La hoja de ruta del futuro debe ir hacia la juventud como principal objetivo", señaló el ucraniano.
Coe y Bubka, dos hombres acostumbrados a la victoria, tienen un importante desafío el miércoles.
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