Cristiano pidió el cambio por precaución y solo sufre fatiga muscular

Cristiano Ronaldo tuvo que ser sustituido en el José Zorilla por Álvaro Morata tras llevarse la mano al bíceps femoral. El ariete portuguésabandonó el campo en el minuto 8 y se quedó en el banquillo. Las sensaciones del jugador son buenas y solo sufre fatiga muscular, aunque está pendiente de someterse a las pruebas médicas.

Es un dolor reincidente en el portugués que ha salido del campo por precaución. Ronaldo esperará a las pruebas que certifiquen la duración de la lesión, a diecisiete días para la final de Lisboa contra el Atlético de Madrid.

Cristiano Ronaldo ya informó ayer a Ancelotti, en el último entrenamiento antes de jugar en Zorrilla, que no estaba del todo bien. El pasado 2 de abril se lesionó ante el Borussia en la Champions y estuvo de baja hasta el 19 de abril. De hecho, no jugó el partido de vuelta en Dortmund ni la final de Copa contra el Barça. Reapareció contra el Bayern.

También acabaron el partido con problemas físicos el defensa portugués Pepe y el argentino Ángel Di María. "Parece que ninguna (de las lesiones) reviste gravedad. Vamos a esperar un poco de tiempo a ver cómo evolucionan", destacó Pardeza a Canal Plus, y señaló que Ronaldo "se ha retirado por precaución" y que Pepe "tiene un gemelo muy cargado", aseguró Pardeza.¿Cómo se trata esta lesión?

Según el Doctor Diego Collado, especialista en Cirugía Ortopédica y Traumatología de Centro Médico Teknon el dolor es el principal síntoma en una lesión fibrilar, por la elongación excesiva del músculo. Para poder confirmar el diagnóstico es fundamental la historia clínica y la exploración física por parte de un especialista, quien puede solicitar una ecografía para confirmar la lesión, así como la extensión y la gravedad de ésta. En casos severos, también puede solicitar una Resonancia Magnética, asegura al diario Sport.

El reposo es el principal tratamiento para este tipo de lesión, dando tiempo a que el tejido se recupere por sí mismo. En el caso de un deportista de élite, habitualmente el reposo debe mantenerse durante dos o tres semanas; aunque la severidad de la lesión es la que determina los días de reposo. Pasado este tiempo, es fundamental realizar un entrenamiento progresivo, iniciando la actividad física de forma suave para trabajar el músculo y volver a la forma física anterior a la lesión.