Cristiano Ronaldo sigue siendo el futbolista más rápido del mundo

El Corriere dello Sport publica un ranking de los futbolistas más rápidos del mundo, a raíz de medir la velocidad de Biabiany, extremo del Parma, que podría alcanzar registros como para entrar en unas semifinales olímpicas de los 100 metros, con 10,3 segundos, alcanzando una velocidad de hasta 30 kilómetros a la hora.

Claro que según el mismo rotativo, la velocidad máxima que puede alcanzar Biabiany está lejos del futbolista más rápido del mundo en la actualidad, que es Cristiano Ronaldo, con 33,6 kilómetros a la hora. Casi un scooter de andar por ciudad.

En segundo lugar estaría también un ex madridista, Arjen Robben (Bayern), que puede llegar hasta 32,9 kilómetros por hora. Tras él se encuentra Theo Walcott (Arsenal) 32,7 km/h, y Robin Van Persie (también del Arsenal) con 32,1 km/h.

Entre los más rápidos también estarían Rooney y Tevez, según el deportivo italiano que hace especial mención a que los futbolistas más veloces del mundo juegan, en su mayoría, en la liga inglesa.

Claro que para que nadie se llame a engaño hay que dejar claro que estas velocidades suenan a juego de niños si las comparamos con la del plusmarquista mundial de los cien metros. Porque Usain Bolt llega a alcanzar picos de 45 kilómetros por hora, y en el último mundial logró una velocidad media muy cercana a los 38 km/h.

Es indudable que el fútbol se ha acelerado bastante en los últimos quince años, y por eso adquiere mayor importancia no sólo las puntas de velocidad, sino, sobre todo, el tiempo que los futbolistas sean capaces de mantener esos ritmos, que habitualmente son picos que no van más allá de los dos o tres segundos. Pero en el caso de Biabiany la cosa cambia, porque él es capaz de mantener su punta de velocidad durante 20 ó 30 segundos, lo que lo convierte en un fenómeno excepcional en el mundo del fútbol.