Ginebra, 15 may.- Ernst Bromeis, el nadador suizo que tenía la intención de cubrir a nado en el plazo de un mes los 1.230 kilómetros de longitud del río Rin, abandonó su aventura tras cubrir 400 kilómetros en 12 días, debido al frío y a problemas físicos.
Según informó hoy la agencia local de noticias, Bromeis (44 años) anunció el lunes que completaría la mayor parte de las etapas restantes a bordo de un kayak, pero en las últimas horas decidió abandonar su aventura por sentirse "demasiado cansado".
Pese a la preparación a la que se había sometido, las condiciones meteorológicas durante los 12 días de travesía -fundamentalmente el frío y el granizo- le obligaron a retirarse después de recorrer los primeros 400 kilómetros desde el nacimiento del río, en los Alpes.
El proyecto se bautizó "El milagro azul-Rin 2012" y en él participó el departamento suizo de Turismo, que promueve una campaña para mostrar los atractivos hídricos del país y persigue, a la vez, concienciar de la fragilidad y el valor del agua.
La aventura comenzó el pasado día 2 con un baño simbólico en el lago Toma (centro de Suiza), que todavía estaba congelado por aquel entonces.
El final de la primera etapa lo recorrió con esquís y después, en diferentes tramos, se vio obligado a caminar a lo largo del río en función de la profundidad del agua y los obstáculos dentro de ella, logrando avanzar una media diaria de 30 kilómetros.
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