El histórico estadio "Palmar de Junco" aún reúne a glorias del béisbol cubano

Pilar Valero

Matanzas (Cuba), 10 may.- Aunque superan los sesenta años, siguen conservando el porte atlético y la pasión por el béisbol que les hizo ganar medallas de oro entre los años 60-70 y que dieron la gloria a Cuba en competiciones internacionales.

Entre ellos, los legendarios José de la Caridad Méndez, Martin Dihigo, Rigoberto Rosique, Félix Isasi, Wilfredo Sánchez, Gaspar "el Curro" Pérez y Lázaro Junco.

Algunos siguen acudiendo a los entrenamientos y partidos en el histórico "Palmar de Junco", en la ciudad de Matanzas (a unos 100 kilómetros al este de La Habana), una instalación del siglo XIX considerada el estadio de béisbol en activo más antiguo del mundo.

Félix Isasi, que consiguió seis medallas de oro en campeonatos mundiales en el 69 y en los años 71 a 76, relató a Efe el orgullo que sintió al representar a su país y culminar el objetivo de regresar con medallas de oro.

Pero negó sentir nostalgia por aquella época porque "todo son etapas, en las que uno nace, cumple su misión en la vida y muere", reflexionó el ex deportista de 68 años y que dedicó al béisbol 23 años de su vida.

Al igual que su compañero, Wilfredo Sánchez (61 años), con varias medallas de oro en 1978 y 1980 en los campeonatos mundiales de Italia y Japón, siguen calando la gorra de deportistas y animan con fuerza en un partido a los más jóvenes.

"Yo luché con mucho amor y ahora animo a otros equipos en su lucha por clasificar", dijo Sánchez a Efe.

En el estadio "Palmar de Junco", este pasado jueves miles de personas animaban un partido de la liga juvenil con música y bailes cubanos, bajo el potente sol del Caribe.

En esta instalación, el 27 de diciembre de 1874 se registró el primer juego oficial de béisbol en la isla, entre las selecciones del Habana Baseball Club y los locales, donde brilló el receptor Esteban Bellán.

Y también se celebró aquí el primer encuentro internacional en la historia de este deporte en Latinoamérica.

El estadio "Palmar de Junco" fue declarado Patrimonio de la Humanidad y es considerado monumento nacional en Cuba.

En las paredes del estadio se pueden leer lemas como "Creo en ti revolución" o "Sí se puede" este último aparentemente de influencia estadounidense y que fue añadido hace unos tres años, según dijo a Efe un ex jugador.

La ciudad de Matanzas, con 154.000 habitantes, promociona como atractivo turístico además de su histórico estadio de béisbol, el cementerio aborigen más antiguo del mundo o, en la céntrica Plaza Libertad, la estatua que dicen representa la imagen más cercana del rostro verdadero del héroe nacional José Martí.

Matanzas debe su nombre, según la leyenda, a que se perpetraron allí grandes matanzas de indios aborígenes llegados desde distintos lugares de América durante el siglo XV.

Algunos siglos después, en 1833, sufrió la epidemia de cólera más grave en Cuba y que exterminó a 15.000 personas en apenas 27 días.