Varsovia, 9 ago.- El Slask Breslavia polaco, rival del Sevilla en la última ronda previa a la fase de grupos de la Liga Europa, está ofreciendo una cara pobre en la liga polaca aunque sorprende su juego vistoso y ofensivo en Europa, donde dos hombres marcan la diferencia: el extremo Sobota y el capitán Mila.
El Slask ha sacado dos puntos en los tres primeros partidos de la liga polaca (la Ekstraklasa), campeonato que ganó hace dos años, un tímido arranque para un equipo que aspira a consolidarse como uno de los tres mejores equipos de Polonia.
Ya el pasado año ocuparon el tercer puesto de la Ekstraklasa, además de hacerse con el subcampeonato de Copa ante el Legia de Varsovia.
Este equipo, fundado en 1947, suele jugar con un 4-2-3-1 y presume de una buena línea ofensiva, con Sobota, "un extremo derecho rápido y bueno técnicamente", como uno de los hombres más destacados, explicó a Efe el segundo entrenador del Legia de Varsovia, el guipuzcoano Jose Antonio Vicuña "Kibu".
De hecho Sobota anotó ayer dos goles y es el único internacional absoluto del Slask además de uno de los principales protagonistas del juego vistoso que los de Breslavia están ofreciendo en Europa.
"Junto a él el capitán y estrella del equipo, Sebastian Mila, por el que pasan todos los balones y que tienen un guante en la pierna izquierda para aprovechar acciones a balón parado", apuntó "Kibu", uno de los españoles que mejor conoce el fútbol polaco y responsable del blog "Lakibuteka.com".
En el medio del campo juegan de pivotes Kazmierczak, "muy bueno en juego aéreo y con excelente disparo con la izquierda", y el esloveno Stevanovic, que militó en el Alavés y en la Real Sociedad, "más técnico y con más llegada que su compañero", añade el técnico del Legia.
La portería la ocupa Gikiewicz, quien ha dejado en el banquillo al ex del Numancia y Tenerife, el eslovaco Kelemen.
Además de Kelemen y Stevanovic, entre los hombres de Stanislav Levy se encuentra otro viejo conocido del fútbol español: el delantero portugués Marco Paixao, que ha militado en la Segunda B española y que destaca en los balones aéreos.
Los mayores problemas los tiene el Slask en defensa, donde han perdido esta temporada a su mejor jugador, Kowaczyk, lo que obliga a Levy a formar la línea de atrás con Ostrowski, Pawelec, Kokoszka y el brasileño Dudú.
Como subraya "Kibu", el Slask no tienen presión en Europa y sale al campo sin complejos, aunque en Polonia les puede la presión de estar arriba y en algún momento se han llegado a venir abajo por eso.
Un ejemplo de ese juego fresco en Europa ha quedado patente con la eliminación del Brujas que entrena el ex del Villarreal Juan Carlos Garrido.
El partido contra el Sevilla se disputará los próximos 22 y 29 de agosto.
El encuentro de ida se jugará en Polonia, en el estadio Miejski de Breslavia, con capacidad para algo más de 42.000 espectadores y una de las sedes de la pasada Eurocopa, mientras que el de vuelta será en el Sánchez Pizjuán.
El Slask cuenta con una potente hinchada que no deja de animar a su equipo durante los 90 minutos, aunque también se la recuerda por haber protagonizado enfrentamientos con aficiones rivales como el que tuvo lugar en marzo de 2003, que se saldó con un fallecido, más de 200 hinchas detenidos y cuchillos, clavos y bates incautados.
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