El Valencia, contra la maldición alemana

De nuevo Alemania, con el recuerdo fresco de la eliminación la temporada pasada ante el Schalke 04. Del 0-1 en el minuto 17 a una vertiginosa remontada con festival de fútbol local que apartó de la Champions a los de Emery. Este miércoles, el Valencia visita el BayArena con la intención de remontar el vuelo en Europa y escribir una página feliz en Leverkusen.

Históricamente, los equipos españoles naufragaban con frecuencia en Alemania, y el Valencia no fue ajeno a esta tendencia. El Bayern de Múnich abrió la herida levantina en el año 68 con un gol de Gerd Müller. El zurdo Ziege reeditó triunfo en 1996 con un tanto tempranero, pero hay una derrota que escuece más que el resto. No sucedió en tierras bávaras, sino en San Siro, y significó la segunda derrota consecutiva en una final de la Champions.

A Mendieta no le tembló el pulso en el minuto dos para adelantar al cuadro de Héctor Cúper de penalti. Effenberg empató desde el punto fatídico y de ahí se llegó al calvario. Zahovic, Carboni y Pellegrini se toparon con Kahn. El resto es ya historia, amarga como las lágrimas de Cañizares, negra como el 7-0 en Karlsruhe en la UEFA del año 93. Estériles fueron los goles de Penev y Mijatovic en el Luis Casanova.

Once partidos y una única victoria, en 2007. Un solitario gol de David Villa permitió al Valencia ganar en Gelsenkirchen. El "guaje" marcó su último triplete con la camiseta blanca ante el Werder Bremen, en un vibrante partido que acabó con empate a cuatro –Mata anotó el otro gol "ché"-. Las estrellas volaron, el fútbol sigue. El Bayer Leverkusen espera. En plena fase de grupos, con solo dos puntos, las opciones de llegar a octavos de la Champions pasan por carburar en tierra hostil.