Las grandes estrellas brillan por su ausencia en la Eurocopa-2016

Ni Cristiano Ronaldo, ni Paul Pogba, ni Zlatan Ibrahimovic o Robert Lewandowski han podido frotar la lámpara por ahora en una Eurocopa de Francia-2016 corta en emociones y escasa en goles dentro del campo, y que sigue esperando el estallido de sus grandes estrellas después del debut de las 24 selecciones.

Los jugadores más esperados han tenido un estreno a media luz, como se pudo ver en el Italia-Bélgica (2-0) a Eden Hazard y Kevin de Bruyne, líderes de la generación dorada de los Diablos Rojos, perdidos y casi sin tocar la pelota. Igual cuadro para el alemán Mario Gotze, autor del gol que le dio el título a la Mannschaft en Brasil-2014 frente a Argentina: su debut europeo tardó literalmente 18 minutos y 26 segundos para dar su primer pase.

También pasaron desapercibidos Toni Kroos y Thomas Müller, todos muy tibios en el 2-0 contra Ucrania, en Lille, donde la gran figura fue el portero Manuel Neuer, reafirmando que esta es una Eurocopa en la que por ahora los porteros le quitan los flashes a los fantasistas.

Otros directamente se metieron en lagunas de las que no pudieron salir hasta verse reemplazados: el turco Arda Turam, armador de los otomanos, salió faltando 25 minutos cuando su equipo perdía de lo mal que andaba. "Pido perdón al pueblo turco. He jugado muy mal", reconoció el volante del Barcelona.

Lo mismo sucedió con Pogba y Antoine Griezmann en los Bleus. Con el bisturí de sus pases quirúrgicos desafilado y la pólvora mojada, el seleccionador Didier Deschamps tuvo que sustituirlos, en la victoria in extremis ante Rumanía (2-1) en el duelo inaugural del torneo en París.

"Lo importante no es como empieza, sino como acaba", se defendió por su parte Cristiano Ronaldo, tras una noche sin poder desequilibrar a la defensa de... Islandia (1-1).

Ronaldo tuvo otro partido pálido, como el de la final de la Liga de Campeones con el Real Madrid ante Atlético Madrid (victoria por penales tras 1-1), pero nada le asegura que podrá tirar de sus compañeros como sucede en el Merengue.

Portugal es "Cristianodependiente" y eso se corroboró en Saint Etienne. Igual panorama para Ibra. En el París SG es una cosa, pero en Suecia tiene otras devoluciones. Sólo un chispazo suyo ayudó a su selección a rescatar un empate 1-1 ante una mejor Irlanda, que se hizo el gol en contra.

En Inglaterra, Wayne Rooney ya no es el de antes. Con sus 30 años hasta ha cambiado de puesto y juega más retrasado, pero todos miraban a Harry Kane (22 años), goleador de la Premier League, para ver la nueva explosión de un crack de los Pross, pero poco pudo hacer ante Rusia en Marsella (1-1).

De todos modos, siempre hay excepciones, comenzando por el español Andrés Iniesta, quien parece asegurar siempre partidos de siete puntos sobre diez para arriba, aunque su trabajo silencioso no brilla tanto como las perlas mediatizadas de CR7 o Ibra. Asistencias, como el gol que le sirvió a Gerard Piqué ante República Checa en Toulouse (1-0), posesión de balón, prácticamente cero pérdidas lo hacen completo, en la sombra.

"Siempre he tratado de tener una responsabilidad alta, independientemente del momento, así concibo el fútbol, así lo he vivido siempre, y ésta no es una excepción", señaló el centrocampista del Barcelona de 32 años.

Responsabilidad que también asumió Luka Modric en Croacia, marcando un golazo que dio el triunfo a la Cuadriculada contra Turquía en París (1-0), Gareth Bale en el 2-1 de Gales frente a Eslovaquia, que este miércoles revivió gracias al creador eslovaco Marek Hamsik, autor de una perla en el 2-1 frente a Rusia.