Guardiola: tres ligas con tres momentos y un lugar clave

La Liga es la competición en la que más importa la regularidad, una carrera de fondo en la que mantenerse fiable jornada tras jornada te asegura un buen premio al final de temporada. Por ello, Guardiola siempre la ha dado una trascendencia mayor que a las demás. "Es la competición más importante del año. La que tiene más 'glamour' es la Champions, pero la mejor es la Liga y personalmente es la que más ilusión me hace", aseguró.

Pese a ello, en cada una de las que ha conquistado ha tenido un momento clave, un partido que fue decisivo para el devenir de la misma, y que precisamente ha sido en todas ellas con el Real Madrid enfrente.

Temporada 2008-09: El, ya histórico, 2-6 del Bernabéu.

En la que fue la primera campaña de Guardiola al frente de los azulgrana, éstos devolvieron la visita a los madridistas en la Liga en la jornada 34, con cuatro puntos de distancia entre ambos. El Real Madrid había vivido una temporada tempestuosa, con cambios de entrenador y presidente incluidos, pero de la mano de Juande Ramos había logrado mantener viva la lucha por la Liga.

El Barcelona llegó a la cita en Chamartín en el mejor momento de la temporada, con todas sus piezas engrasadas y un juego espectacular, y lo refrendó en el mejor escenario posible para sus aficionados. Con un ajuste de piezas, ubicando a Messi de falso delantero, Guardiola desarboló todo el planteamiento del Real Madrid, que nada pudo hacer ante el vendaval blaugrana. Al final del partido, el 2-6 que reflejó el marcador del Bernabéu dejó una imagen que pasó a la historia, a la vez que puso el título de Liga camino del Camp Nou.

Temporada 2009-10: Máxima igualdad, decisivo al máximo

La campaña pasada llegó antes el segundo duelo liguero entre los dos grandes del fútbol español: en la jornada 31, a falta de siete para el final. Pero la emoción no podía ser mayor: con los mismos puntos, 77, y el Real Madrid como líder. Para los blancos, aquel era la última oportunidad para salvar una temporada, la primera tras el regreso de Florentino Pérez, marcada ya por fracasos muy sonados como el 'Alcorconazo' y la eliminación ante el Olympique de Lyon.

Y de nuevo, Guardiola salió triunfador del Santiago Bernabéu, gracias a otra actuación estelar de Messi. El argentino, con un tanto en cada parte, decidió un choque muy intenso, pero en el que los azulgranas fueron superiores. Con esa victoria (0-2), muchos dieron la Liga conquistada ya para los azulgranas, pero los tres puntos de diferencia se mantuvieron hasta la última jornada. Eso sí, fue un triunfo que, a la postre, valió el título.

Temporada 2010-11: Un choque clave camuflado en el póker de clásicos

El de la actual liga lo tenemos reciente, ya que se disputó hace poco menos de un mes. El enfrentamiento liguero entre Real Madrid y Barcelona que acogió el Bernabéu fue el primero de los cuatro que disputarían los eternos rivales en el plazo de tres semanas. Tal vez, dentro de esa vorágine, éste fuera el encuentro que menos trascendencia tuviera del cuarteto, por ser el inicial y porque las repercusiones de los otros (una final de Copa y unas semifinales de Champions League) eran amyores. Pero en lo referente a la Liga, fue decisivo para teñirla definitivamente de azulgrana.

Ocho puntos separaban al equipo de Guardiola del dirigido por Mourinho. Era la última oportunidad para los blancos de seguir peleando por la competición liguera, de mantener vivas sus opciones al título. El empate final (1-1), con goles de Messi y Cristiano Ronaldo de penalti, dejó sentenciada la competición, pero la remontada con diez jugadores sirvió a los blancos para ganar confianza y moral de cara a la final de Mestalla que finalmente conquistaron.