¿Han sido los difusores soplados la clave del triunfo de Alonso en Silverstone?

La FIA es una casa de locos: los movimientos de las últimas semanas en los que no sabía si aceptar o no los difusores soplados así lo demostraban, pero lo que ha pasado este fin de semana ha superado todas las expectativas, al cambiar las reglas de competición hasta en tres ocasiones durante el Gran Premio de Gran Bretaña en Silverstone.

¿Se imaginan que la Federación Española de fútbol dijera en vísperas de una jornada de Liga que ese fin de semana no habría penaltis? ¿O que durante esa jornada habría que ver tres tarjetas amarillas para ser expulsado? ¿O que se puede tocar el balón con la mano y no pasa nada? Lo sucedido con la polémica de los difusores soplados ha sido algo parecido.

Una explicación rápida de lo que significa la polémica: con la actuación de los escapes sobre el difusor cuando el piloto está frenando permite que los escapes sigan enviando gases y aire al difusor aunque el piloto no esté haciendo uso del acelerador, creando carga aerodinámica que ayuda a estabilizar la frenada y a mantener la adherencia en las curvas lentas.

Este sistema es la gran diferencia entre Red Bull y el resto de sus rivales, que han tenido que ir siempre por detrás de la escudería austríaca para acortar distancias. Las protestas han sido muchas, por lo que la FIA decidió poner fin a su uso en el Gran Premio de Gran Bretaña con la polémica que ya hemos contado a lo largo del fin de semana.

Tres días y tres reglas

Durante los entrenamientos del viernes se dejó utilizar al 10 por ciento en unos casos y al 68 en otros, tras la petición de los equipos que montan motores Renault de que su prohibición podía provocar roturas de motor. Sin embargo, la lluvia que hizo acto de presencia en Silverstone no permitió sacar conclusiones sobre los tiempos.

En la calificación del sábado, la FIA decidió que pudiera usarse el sistema al 50 por ciento y Ferrari estuvo mucho más cerca de sus rivales que a lo largo de toda la temporada. Aunque Red Bull hizo doblete, Alonso se quedó a sólo 117 milésimas de la 'pole', algo inimaginable hasta ahora.

Para la carrera del domingo se prohibió utilizar el sistema completamente y los resultados están ahí: los Red Bull comandaron la carrera al comienzo, aprovechando que el trazado es muy favorable a sus características, pero Ferrari se fue acercando poco a poco y Fernando Alonso terminó aventajando en veinte segundos a Vettel y Webber, segundo y tercero respectivamente.

La conclusión parece evidente: con difusores soplados funcionando al 100 x 100 durante la temporada, los Red Bull han sido casi inalcanzables. Funcionando al 50 por ciento, Alonso ha estado casi pegado a Vettel y Webber en la calificación de Gran Bretaña. Y sin difusores soplados, el asturiano ha colocado su Ferrari en lo más alto del podio aventajando en 20 segundos al equipo que da alas. Lástima que en el Gran Premio de Alemania, todo volverá a ser igual al permitirse de nuevo los difusores soplados.