Hirscher busca hacer historia en nueva temporada del esquí alpino

"Intento únicamente continuar haciendo un buen trabajo": el austríaco Marcel Hirscher, que se esfuerza por mantenerse humilde, tiene sin embargo la posibilidad de hacer historia en la nueva temporada de la Copa del Mundo de esquí alpino, que comienza este fin de semana, con el eslalon gigante de Solden (Austria) y donde aspira a un sexto título consecutivo en la general global.

Hirscher igualó la pasada campaña, con cinco títulos en la general de la competición, al luxemburgués Marc Girardelli en el palmarés histórico, aunque ese último no los logró de manera consecutiva, como sí hizo el austríaco.

En la categoría femenina, la austríaca Anne-Marie Moser-Proell cuenta con seis grandes globos de cristal de la Copa del Mundo, pero no fueron consecutivos. Por lo que Hirscher está ante la oportunidad de elevar un grado la proeza.

El esquiador de Salzburgo invitó a finales de julio a la prensa internacional a subir hasta su refugio familiar en Annaberg, a unos 1.500 metros de altitud, donde pasó sus veranos hasta los 16 años junto a su padre Ferdinand, su entrenador de entonces.

Hirscher, especialista en eslalon y gigante, puso fin entonces a los rumores sobre una retirada anticipada, que se habían disparo por el silencio de la estrella austríaca al respecto.

"Mi principal motivación es esquiar. Esquiar es algo genial. Sin trabajo, sin entrenamiento, no hay sensaciones ni placer. Continuaré mientras siga disfrutando. Lo bueno es que no le debo nada a nadie", explicó el austríaco.

Hirscher, de 27 años, tendrá que enfrentarse en el nuevo curso a la presión de los jóvenes, especialmente del noruego Henrik Kristoffersen (23 años), figura del eslalon y segundo en la general la pasada temporada, y del francés Alexis Pinturault (25 años), tercero en el podio final de la temporada desde hace tres temporadas.

Ilustres veteranos como Aksel Lund Svindal y Bode Miller difícilmente podrán lucharse a esta pugna. Svindal, dos veces campeón de la Copa del Mundo (2007 y 2009), cumplirá 34 años en diciembre y renunció al gigante de apertura de Sölden este domingo, estimando que su forma no era óptima tras la operación en la rodilla derecha a la que se sometió en enero.

El genial Miller, campeón de la general en 2005 y 2008, está intentando regresar a la primera línea a sus 39 años. Una misión que no es sencilla y para la que el estadounidense tendrá que olvidarse del gran conflicto que mantiene con su anterior marca deportiva.

Otra estrella del 'Team USA' y tres veces campeón del mundo de gigante, Ted Ligety, regresa a la competición tras superar una lesión.

La también estadounidense Lindsey Vonn no estará en Sölden. El eslalon gigante nunca fue su prueba fuerte, pero en velocidad (descenso y supergigante) cuenta con argumentos suficientes para aspirar a un quinto gran globo frente a la defensa del título, la suiza Lara Gut.

Como Hirscher, Gut prefiere mantener un perfil bajo: "No tengo nada que defender, sino algo por ganar".

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