Japón respondió a lo campeón y Holanda sorprendió a Cuba

  • El inicio de la segunda ronda de la tercera edición del Clásico Mundial de Béisbol dentro del Grupo 1 dejó los triunfos de Japón, que respondió como bicampeón defensor del título, ante China Taipei, y de Holanda, que dio la gran sorpresa frente a Cuba.

Tokio, 8 mar.- El inicio de la segunda ronda de la tercera edición del Clásico Mundial de Béisbol dentro del Grupo 1 dejó los triunfos de Japón, que respondió como bicampeón defensor del título, ante China Taipei, y de Holanda, que dio la gran sorpresa frente a Cuba.

Esta vez si, el bateo de Japón respondió en el momento decisivo y los bicampeones del Clásico Mundial de Béisbol vinieron de atrás para remontar dos veces un marcador adverso y ganar 4-3, en 10 entradas, a China Taipei, ante miles de seguidores que llenaron las gradas del Tokio Dome, de la capital nipona, sede de la competición.

El relevista Sho Tanaka remolcó la carrera del triunfo con un elevado de sacrificio en la décima entrada y Japón dio un paso de gigante para estar de nuevo en las semifinales si el domingo vence a Holanda.

El elevado de Tanaka al jardín central remolcó al emergente Nobuhiro Matsada, que jugó en la tercera base, con la carrera del gane.

Antes, en la parte alta de la novena entrada, el segunda y primera base Hirokazu Ibata había pegado también un sencillo que produjo la carrera del empate a 3-3 y alargó el partido en un duelo que necesitó cuatro horas y 37 minutos antes de decidirse a favor de Japón ante el delirio de sus seguidores, que llenaron el Tokio Dome.

El relevista Toshiya Saguichi, séptimo lanzador que utilizó Japón, se encargó de sacar los tres últimos "outs" del partido a pesar de permitir dos imparables y dejar Taiwán con corredores en circulación.

El ganador del partido fue el también relevista Kazuhisa Makita (1-0) que trabajó el noveno episodio y cedió un imparable, dio una base por bolas y sacó un ponche.

La derrota fue para el relevista Hung-Wen Chen (0-1), que lanzó una entrada y un tercio y fue castigado con dos indiscutibles, le hicieron dos carreras limpias, dio dos bases por bolas y no sacó ningún ponche.

El mérito de Japón es que está jugando con peloteros de su liga profesional porque los que militan en las Grandes Ligas no participan con el equipo nacional.

El equipo de Taiwán tiene que vencer el sábado a Cuba para avanzar, lo mismo que le sucede a la novena antillana que no pudo con el gran juego de equipo que presentó Holanda.

Para el partido contra Cuba, Taiwán tiene decidido que abra el lanzador Ching-Lung Lo que se enfrentará a Danny Betancourt, que estará en el montículo por la novena antillana.

El equipo de Holanda siguió en su línea de "matagigantes" y sorprendió con otro triunfo brillante al imponerse por 6-2 al de Cuba, que había llegado invicto de la fase de grupos como campeón del Grupo A.

Pero Holanda, que quedó segunda en el Grupo B, al igual que hizo en el partido inaugural contra Corea del Sur, el gran favorito, al que venció por 5-0, frente a Cuba presentó un pitcheo hermético, una defensa excepcional y un bateo explosivo y oportuno.

Nada menos que cinco dobles matanzas las que logró la defensa de Holanda, que también comenzaron los fuegos artificiales en la parte alta de la segunda entrada cuando Curt Smith pegó jonrón solitario y el campocorto Andrelton Simmons impulsó el parcial de 2-0.

El abridor zurdo Diegomar Markwell volvió a lanzar una joya de pelota al trabajar seis entradas completas, en las que espació nueve imparables, incluido el jonrón solitario que le conectó el jardinero izquierdo Alfredo Despaigne, dio una base por bolas y no sacó ningún ponche.

Markwell (1-0) se quedó con el triunfo que aseguraron los relevistas Leon Boyd, que lanzó dos entradas completas, en las que permitió tres hits, incluido el segundo cuadrangular de la noche de Cuba, que lo pegó el tercera base Yulieski Gourriel.

Mientras que Loek Van Mil sacó los tres últimos "outs" del partido sin hacer ninguna concesión.

El abridor Ismel Jiménez (0-1) fue sacado del montículo inmediatamente por el piloto del equipo de Cuba, Víctor Mesa, pero el daño ya estaba hecho al haber permitido cinco imparables con dos carreras limpias, dio dos bases por bolas y sacó un ponche en una entrada y dos tercios que estuvo en el montículo.

Cuba intentó cambiar la historia del partido cuando en la parte baja de la segunda entrada Despaigne pegó el jonrón solitario que acortó la desventaja (2-1), pero fue cuando surgió la gran defensa de Holanda que les impidió hacerles más daño a Markwell.

Si lo hizo Holanda, que en la parte alta de la sexta entrada volvió a surgir el bate explosivo, esta vez del segunda base Jonathan Schoops, el prospecto de los Orioles de Baltimore, y pegó jonrón de tres carreras contra el relevista Yadier Pedroso que habían reemplazado a Freddy Álvarez que dejó en circulación a Sams y Simmons.

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