Jules Bianchi, una vida ligada al automovilismo

    • El piloto comenzó a competir en su infancia gracias a la influencia de su padre y su tío abuelo
    • Cumplió su sueño al competir en la Fórmula 1, que pierde a una sus promesas con su prematuro fallecimiento
Jules Bianchi, una vida ligada al automovilismo
Jules Bianchi, una vida ligada al automovilismo

La carrera más dura en la vida de Jules Bianchi ha finalizado ayer. El piloto de 25 años ha fallecido tras nueve meses en coma que han supuesto una intensa lucha. Promesa de la Fórmula 1, y conocido por su eterna sonrisa, Bianchi nos deja a medio camino de una vida profesional llena de alegrías.

Nacido en Niza el 3 de agosto de 1989, estaba destinado a adentrarse en el mundo del motor. Además de la proximidad de su ciudad natal con el circuito de Monaco, su tío abuelo Lucien Bianchi fue también piloto de Fórmula 1, y su padre un gran aficionado el mundo del motor. Con estas credenciales, a Jules le entusiasmó desde pequeño el automovilismo y comenzó a competir en karting.

En 2007 dio el salto a la Fórmula 3 y dos años después de alzaba con el título de la categoría en una temporada memorable con nueve triunfos. Tras su paso por la GP2 y la Fórmula Renault 3.5, será en 2010 cuando el piloto francés tome contacto con la competición reina, la Fórmula 1.

La escudería Ferrari lo contrató como piloto reserva después de una pruebas en Jerez. Jules brilló y y firmó con la Ferrari Drive Academy, y durante su estancia en la escudería italiana entabló una gran amistad con Fernando Alonso.

Su aparición en la parrilla de salida del campeonato tuvo lugar en 2013, cuando después de optar a un puesto de primer piloto en Force India, Jules recaló en la escudería Marussia. A pesar de las dificultades de su monoplaza Bianchi durante el campeonato consigue resultados meritorios quedando por delante de sus principales rivales en la mayoría de carreras.

Su buen hacer le vale para obtener la renovación y en 2014 en su circuito preferido, Monaco, consigue sus primeros dos puntos en su trayectoria en la Fórmula 1 al terminar en el noveno puesto. Sin embargo, el nefasto accidente en el Gran Premio de Japón de esa temporada truncó cualquier aspiración de Bianchi, relegando al joven piloto a un estado de coma, del cual no ha podido recuperarse pese a una lucha sin cuartel.

"Jules ha luchado hasta el final, como siempre hizo, pero hoy su batalla ha llegado al fin",ha explicado su familia. Jules Bianchi se fue debido al riesgo que implica su profesión, pero lo hizo cumpliendo su sueño de niño.

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