Karabatic y Hansen se retan de nuevo por el cetro mundial

Javier Villanueva

Madrid, 13 nov.- El Campeonato de Europa que arrancará el domingo en Serbia será el escenario del segundo asalto del duelo que desde el pasado año mantienen el francés Nikola Karabatic y el danés Mikkel Hansen por el título de mejor jugador mundial.

Una pugna, en la que por el momento, vence a los puntos el central galo, que en 2011 no sólo arrebató al joven nórdico el oro en el Campeonato del Mundo de Suecia, sino también el galardón de mejor jugador de un torneo, en el que Hansen tuvo que "conformarse" con ser elegido mejor lateral izquierdo además de máximo goleador.

Y es que si por algo sobresale la superestrella danesa, todo un ídolo en su país, es por su portentoso lanzamiento, una faceta en la que el exjugador del Barcelona maneja todas las suertes, con un amplio repertorio que abarca desde la violencia más extrema a la sutileza propia de los jugadores más habilidosos.

Un poderoso brazo del que también puede presumir Karabatic, que une a su inmenso talento un impresionante físico, que le convierte en un extraordinario defensor, sin cuyo concurso sería inexplicable la supremacía del conjunto francés, vigente campeón olímpico, mundial y continental.

Éxitos en los que también ha jugado un papel determinante el portero Thierry Omeyer, que ausentes el polaco Slawomir Szmal, aquejado de una lesión de rodilla, y el español Arpad Sterbik, intervenido de una dolencia cardiaca, sólo tendrá la oposición del joven danés Niklas Landin en la carrera por convertirse en el mejor guardameta del Europeo de Serbia.

Cita continental en la que presumiblemente también jugará un papel estelar el central croata Domagoj Duvnjak, que tras perder el paso en el pasado Mundial de Suecia, confía en su excelente visión de juego y su eficaz lanzamiento para convertirse en el tercero en discordia en la lucha entre Karabatic y Hansen por el cetro mundial.

Un trono al que también aspira el checo Filip Jicha, elegido mejor jugador del Mundo en el año 2010, y empeñado en añadir temporada, tras temporada matices y más matices a la figura del "cañonero" clásico hasta convertirse en un jugador total, capaz de competir por el primer puesto del escalafón internacional.

Evolución que no acaba de culminar otro de los más temibles lanzadores que disputarán el Europeo, el serbio Marko Vujin, que encabeza la lista de insignes "bombarderos" en la que no pueden faltar el polaco Karol Bielecki o el macedonio Kiril Lazarov, sin olvidar a una de las mayores promesas del balonmano sueco, el jovencísismo Kim Ekdahl du Rietz.

Estrellas de un Campeonato de Europa en el que también tendrán reservado un rol protagonista extremos de la talla del danés Hans Lindberg o el explosivo Luc Abalo, una nómina en la que no pueden faltar virtuosos como el alemán Uwe Gensheimer o el español Juanín García.

Goleadores implacables que adquieren una nueva dimensión en la figura del islandés Alexander Petersson, que une a la tradicional velocidad y precisión de los exteriores una dosis de agresividad que le permite pese a su inferioridad física defender y atacar con las máximas prestaciones en el puesto de lateral.

Una fiereza que también caracteriza al noruego Byarte Myrhol que peleará por el título de mejor pivote del torneo con el croata Igor Vori y el francés Bertrand Gille, una terna en la que también debería figurar, aunque cuenta con el lastre que supone su ausencia en defensa, el español Julen Aginagalde, gracias a su espectacular solvencia.