La lista más complicada de Del Bosque

Roberto Morales

Schruns (Austria), 27 may.- Desde que Vicente del Bosque asumió el cargo de seleccionador español, nunca había tenido que tomar tantas decisiones que le hiciesen pasar tan mal trago como dejar fuera de la Eurocopa a jugadores que la merecen.

Para el Mundial 2010 fue diferente. Se cayó Santi Cazorla al no llegar a tiempo por una lesión. Se quedó fuera Álvaro Negredo. El número de jugadores que tenían posibilidades ahora de acudir a la gran cita de Polonia y Ucrania era mayor. El seleccionador ha ido premiando a futbolistas de la sub'21 y ha dado toques de atención a jugadores importantes, como Pedro Rodríguez y Fernando Torres, que respondieron en sus clubes y entran en la lista final.

Del Bosque llegó a la sala de prensa con mal cuerpo. Acababa de comunicar la lista a los jugadores igual que hizo ante toda España. De carrerilla. De memoria. Sin la necesidad de mirar un papel. Le ha dado mil vueltas por su cabeza y sabía lo que pasaba por la de cada jugador que se quedaba fuera a última hora.

El calendario y una final de Copa del Rey tan tardía pusieron a Del Bosque en esta tesitura. Diseñó una lista alternativa y hoy debía dar la definitiva, ya con la presencia de los jugadores de Barcelona y Athletic Club de Bilbao. Nada más y nada menos que nueve de los 23 elegidos.

Aunque el seleccionador ya tenía todo decidido. Más que premiar una temporada había decidido ser continuista. Mantener a aquellos que tienen una trayectoria meritoria reciente en La Roja. Casos como Raúl Albiol, que apenas tuvo minutos con el Real Madrid, o los irregulares esta campaña Fernando Torres en el Chelsea y Pedro Rodríguez en el Barcelona tendrían su premio. Otros que han brillado como Roberto Soldado o Adrián López recibirían la mala noticia.

De aquella selección que conquistó la Eurocopa hace cuatro años se mantiene la mitad. "Hemos cambiado al 50% de los jugadores de campo", analiza Del Bosque. "Siete antes de Sudáfrica más Juanfran, Jordi Alba y Negredo ahora. Son 10 de 20 jugadores de campo. Es una renovación que creemos conveniente", añadió.

En la portería nunca hubo ni una sola duda. Iker Casillas, Pepe Reina y Víctor Valdés son fijos. En defensa, ante la ausencia de Carles Puyol por lesión, entró Raúl Albiol y las molestias de pubis de Andoni Iraola en el final de temporada permiten premiar el crecimiento de Juanfran Torres como lateral derecho.

Del Bosque pasa a Sergio Ramos a liderar el centro de la zaga y necesitaba un diestro, ya que Álvaro Arbeloa puede actuar en la izquierda si Jordi Alba sufre algún contratiempo.

En los centrocampistas la mala noticia llegó con Thiago Alcántara y la preocupación con Cesc Fábregas. El sóleo de Xavi Hernández provoca que un sustituto tenga que estar en plenitud. Cesc sufre una elongación muscular que le tendrá una semana de baja. Los médicos han dicho a Del Bosque que tiene tiempo para llegar bien a la Eurocopa.

En los extremos, el seleccionador necesita a Jesús Navas ante rivales que se encerrarán. Es una variante. Pedro es el sustituto natural de Villa, aunque en esa zona el técnico salmantino puede ubicar a David Silva, Juan Mata o incluso mover a Andrés Iniesta. Adrián se quedaba sin espacio. Su etapa en la selección comenzará en septiembre tras ser protagonista en los Juegos Olímpicos.

Por último, en punta, las opciones de Soldado se acabaron desde que Del Bosque decidió premiar a Torres. Su rol en un vestuario en el que faltan Puyol y Villa, su historia en una selección en la que lleva 91 partidos ha pesado. Fernando Llorente y Álvaro Negredo aportan aspectos diferentes.

Al final son 19 campeones del mundo más el regreso de Cazorla y las novedades de Juanfran, Jordi Alba y Negredo. No hubo sorpresas. Solo podían ir 23 y Del Bosque pasó hoy un mal día.

Desde que es seleccionador han debutado en casi cuatro años 27 futbolistas. Nombres como Nacho Monreal, Bruno Soriano o Iker Muniain se quedan en el camino. También los últimos en llegar: De Gea, Domínguez, Javi García, Beñat o Isco. Desde que decidió que la etapa de Raúl se había cerrado en La Roja, Vicente nunca lo tuvo tan difícil.