Las rodillas, más de una década de calvario para el Real Zaragoza

José Luis Sorolla

Zaragoza, 31 ene.- Las rodillas de los jugadores del Real Zaragoza se han convertido en poco más de una década en un auténtico calvario y un quebradero de cabeza para el equipo aragonés que ha visto como algunos de sus mejores hombres se rompían por allí.

La confirmación de la misma lesión por parte del argentino Franco Zuculini y el grancanario Javi Álamo, ambos con rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha, es el último capítulo de esta delicada articulación para los futbolistas.

Aunque la rotura de los diferentes ligamentos de la rodilla siempre han existido en el fútbol, el aficionado zaragocista sufrió su primer gran sobresalto con la lesión de Goran Drulic en agosto de 2001 durante la pretemporada que realizaba en Benasque (Huesca).

El delantero serbio llegó con la etiqueta, en aquel momento, de ser el fichaje más caro de la historia zaragocista cuyo costo se cifró por encima de los doce millones de euros, pero se rompió los ligamentos antes incluso de debutar en un partido oficial y nunca llegó a ser el jugador que prometía.

A partir de Drulic, las lesiones de rodilla se han convertido en un tema casi recurrente en el club maño que incluso ha dejado en la cuneta a varios de los que las padecieron y que terminaron abandonando la práctica del fútbol.

Por el mismo sendero de espinas que ahora deberán transitar Javi Álamo y, sobre todo, un emergente Zuculini, que se había convertido en uno de los hombres fundamentales en el esquema de Manolo Jiménez, con dieciséis partidos jugados, ya pasaron otros nueve jugadores.

De hecho y horas antes de confirmarse la gravedad de la lesión de Álamo y Zuculini por el vestuario maño pasó el lateral serbio Ivan Obradovic para ser revisado por los servicios médicos del club y conocer la evolución de la rotura parcial del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda de la que fue intervenido el pasado mes de octubre.

En la plantilla zaragocista, que arrancó el pasado mes de julio había otros dos hombres, en este caso canteranos, que también tuvieron que pasar en temporadas anteriores por el quirófano con lesiones de rodilla. Los jóvenes centrales Raúl Goni, en estos momentos cedido al Sabadell, y Víctor Laguardia, que se marchó también cedido al Alcorcón y que en su caso pasó hasta tres veces y se encuentra completamente restablecido.

Otro jugador que llegó con galones en la temporada 2009-2010 y se rompió por primera vez, rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, en la segunda jornada liguera fue el delantero nigeriano Ikechukwu Uche, recayendo posteriormente con una rotura del menisco interno de la misma rodilla.

En la temporada 2009-2010 la lesión del nigeriano fue especialmente dolorosa en la entidad maña, ya que fue el cuarto jugador con rotura de ligamentos de la plantilla junto al uruguayo Carlos Diogo, Raúl Goni y el francés Peter Luccin, aunque este último se lesionó jugando como cedido en el Rácing de Santander.

Otros que padecieron lesiones muy similares fueron Luis Carlos Cuartero, actual consejero del Real Zaragoza y en su momento capitán del equipo, que la sufrió hasta tres lesiones en la articulación o el defensa César Jiménez al que una entrada brutal del madridista Luis Figo le destrozó la rodilla izquierda en enero del 2005 y terminó conduciéndole a la retirada.

También pasó por ahí el portero César Lainez, quien sus dolencias de rodillas y un gran número de pasos por el quirófano, aunque su complicado historial médico comenzó en su etapa juvenil, le obligó a abandonar el fútbol en 2005.