Villarreal (Castellón), 8 jun.- El técnico del Villarreal, Marcelino García Toral, admitió sobre el terreno de juego de El madrigal tras el ascenso de su equipo a Primera División que es de "lágrima fácil", pero que este ascenso ha sido "muy especial".
Ataviado con un pañuelo con los colores de la bandera asturiana, Marcelino se acordó de sus padres y de lo que había sufrido en este encuentro, en el que no pudo sentarse en el banquillo al estar sancionado.
"Vinimos a lograr un objetivo que no era fácil y con mucho trabajo lo hemos conseguido", recordó Marcelino, quien ha logrado el ascenso a pesar de que debutó en el primer encuentro de la segunda vuelta con una derrota por 5-0 ante el Castilla.
"Todos los ascensos que he conseguido han sido importantes, pero este es muy especial porque esta institución se jugaba mucho", agregó Marcelino, que tras el encuentro perdido en Madrid sólo ha caído una vez, en casa ante el campeón Elche.
"El cariño de la afición y del club ha sido muy grande y yo estoy muy agradecido por la oportunidad que me ha ofrecido el Villarreal, por la calidad de la plantilla y por todo lo que nos ha dado la afición", destacó.
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