El Mundial 2010 es una prueba de fuego para Álvaro Arbeloa. Criado en la cantera del Real Madrid, tuvo que emigrar a La Coruña primero y a Liverpool después para ganarse el derecho a ser considerado jugador apto para el equipo blanco.
Ahora, y una vez que se ha confirmado como un fijo en su equipo, Arbeloa quiere hacer lo mismo con la Selección y va a utilizar las mismas armas que con el Real Madrid: trabajo, constancia, calidad... y polivalencia.
Porque si una cualidad caracteriza al futbolista castellano es las posibilidades que ofrece al equipo. Salió de la cantera blanca como central y así jugó en el Deportivo, pero Rafa Benítez le reconvirtió en lateral derecho. Sin embargo, no se ha quedado en esa posición, sino que la alterna con el lateral izquierdo cuando su equipo lo necesita.
Central, lateral derecho, lateral izquierdo... y siempre cumplidor. Es Álvaro Arbeloa, un Campeón de Europa que aspira a repetir éxito... pero siendo Campeón del Mundo.
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