Pedro Rodríguez era un desconocido cuando España ganó la Eurocopa 2008 y vio el mayor éxito del fútbol nacional como cualquier otro aficionado, por televisión. Dos años después, es uno de los 23 futbolistas encargados de llevar a la selección española a lo más alto en el Mundial 2010. No verá la cita por televisión, sino que estará en Sudáfrica poniendo su grano de arena en el sueño de todo un país.
Pedro debutó con el Barcelona la pasada temporada y rindió por encima de lo que se esperaba de un novato procedente de Tercera División. Sin embargo, ésta ha sido la temporada en la que el canario se ha salido, batiendo además récords futbolísticos de nivel mundial. Nunca antes un jugador había conseguido marcar en seis competiciones diferentes, las seis en las que ha participado el Barça esta temporada.
La guinda a un año excepcional llegó con la convocatoria mundialista. Pocos jugadores se habían ganado el derecho a viajar a Sudáfrica tanto como Pedro, pero su juventud y el hecho de no haber debutado aún con La Roja hacían albergar dudas con respecto a la decisión de Vicente del Bosque. Al final, el seleccionador fue justo y se lleva al delantero azulgrana al Mundial.
Rápido, entrando casi siempre por la banda izquierda, con muchísima visión de juego para buscar el desmarque necesario y con un olfato goleador que ya quisieran para sí cracks mundiales. En principio, luchará con Mata por ser el jugador que dé descanso a Iniesta, pero Del Bosque ya demostró en el último amistoso que en principio Pedro está un paso por delante del valencianista.
En sus dos primeras aparaciones internacionales ya ha conseguido inaugurar su cuenta goleadora. Lo que toda la afición espera es que sus goles den la vuelta al mundo como una de las grandes estrellas del campeonato.
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