Palencia llora la caída de su mito: Marta Domínguez

Palencia está tocada. Hay un dicho entre los habitantes de esta pequeña y noble ciudad castellana que dice que sólo aparecen en las noticias cuando pasa algo malo. Si no es un timo en la lotería de Navidad es un asesinato por celos o la explosión de un edificio que deja varios muertos. Tragedia tras tragedia.

Marta Domínguez era la encargada de pasear el nombre de Palencia por el mundo con una cinta rosa atada a la cabeza y una bandera de España a su espalda. Era sinónimo de triunfo, de superación, de garra y entrega. Era. Porque se ha caído un mito.

Los mismos que hasta hace cuatro meses, cuando quedó embarazada, la veían correr a diario por la orilla del río Carrión o las carreteras de circunvalación de la ciudad pensando con orgullo "ahí está nuestra Marta", han visto cómo era detenida por la Guardia Civil, su casa registrada por miembros de la UCO, quedaba en libertad con cargos y era acusada no de haberse dopado, que ya es grave, si no de suministras sustancias prohibidas a otros deportistas. De 'camello'.

"La gente está incrédula, nadie se explica cómo una mujer que lo tiene todo puede ser acusada de camello". Son palabras de Alberto Moreno, jefe de deportes de Diario Palentino y una de las voces más autorizadas para hablar de la atleta. "Una cosa es doparse, pero esto se sale de lo normal, es otra cosa. Me resisto a creérmelo".

Moreno representa perfectamente el sentir de los palentinos, tan "asombrados" como él mismo, cuyas tertulias de bar se centran hoy en cuándo habían visto por última vez a Marta en su 'Mini' blanco, si llevaba mucho sin entrenar o si esto le puede afectar o no a su embarazo. Porque, hasta que no se demuestre lo contrario, Marta sigue siendo patrimonio de la ciudad.

Eso sí, en la elección al mejor deportista palentino del año, cuya gala tendrá lugar esta noche, Marta no ganará el premio... por 24 horas. Era la gran favorita, aunque los votos irán finalmente a otro de los candidatos. Será el primer 'revés' que reciba de su tierra. ¿El último? Una estatua encargada por el Ayuntamiento de la capital podría dormir el sueño de los justos si se confirman las acusaciones.

Palencia llora la caída de un mito viviente. Su mito.