Poznan (Polonia), 4 jun.- La selección portuguesa ultima desde hoy su preparación al Europeo en Polonia después de desplazarse de Lisboa a Poznan, al oeste del país, en un vuelo donde la tripulación ofreció típicos pasteles de nata lusos y en el que la prensa encontró trabas para grabar o fotografiar a los jugadores.
La selección capitaneada por Cristiano Ronaldo fue acogida con pompa por una comitiva de autoridades locales en la pista de aterrizaje, donde le esperaba un autobús oficial que les trasladó a la aneja Opalenica, la pequeña localidad en la que los lusos se podrán a punto para el encuentro de Alemania, el próximo sábado.
Durante el vuelo, operado por la aerolínea de bandera portuguesa TAP, Ronaldo, Nani y compañía viajaron en la cabina delantera, distantes de las miradas curiosas de los periodistas, los que compartieron aeronave con los futbolistas, pero a los que se les prohibió captar imágenes o tomar fotografías.
Las cerca de tres horas y media del vuelo, que partió de la capital lusa con ligero retraso, estuvieron amenizadas por las bromas y votos de éxito del comandante y por un menú especialmente portugués coronado por el pastel de nata, conocido también como pastel de "Belém".
"En estos momentos sobrepasamos Alemania a toda velocidad y espero que después sea Dinamarca y holanda", bromeó el comandante en alusión a los rivales lusos en la primera fase mientras trazaba la situación de vuelo.
Los 23 internacionales dirigidos por Paulo Bento se hospedarán hasta el 16 de junio en un hotel de lujo de Opalenica, donde mañana realizarán su primer entrenamiento.
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