Zaragoza (España), 4 ene.- El internacional paraguayo Paulo da Silva fue la nota más positiva del entrenamiento del Real Zaragoza ya que se ejercitó con el resto de sus compañeros y al mismo ritmo lo que, en principio le permitirá estar a disposición del entrenador Manolo Jiménez para el partido del sábado.
Paulo da Silva se produjo una rotura miofascial de grado II en el recto anterior de su muslo derecho en la concentración con su selección a mediados del pasado mes de noviembre de 2011 y desde entonces no ha disputado ningún partido.
El técnico sevillano realizó hoy en el estadio de La Romareda su primera sesión de entrenamiento a puerta cerrada desde que se hizo cargo del equipo aragonés en sustitución del mexicano Javier Aguirre el pasado lunes 2 de enero.
Para Jiménez la recuperación de Da Silva supone una buena noticia ya que recupera a un hombre que, hasta su lesión, era fijo en el centro de la defensa una zona en la que para el partido del sábado contra el Racing tiene las bajas por lesión de David Mateos y por sanción de Maurizio Lanzaro.
Por contra pierde definitivamente para lo que resta de temporada al capitán del equipo, el argentino Leo Ponzio, aunque para medirse a los santanderinos tampoco hubiese podido contar con él por estar sancionado.
El técnico sevillano sigue trabajando a marchas forzadas con los hombres que tiene a su disposición para preparar su primer partido en el banquillo maño que, aunque está pasando casi desapercibido, puede tener un enorme valor añadido en el factor psicológico ya que los cántabros son el equipo que les preceden en la clasificación.
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