Pena máxima para Higuaín: falló una ocasión clara en el último segundo y mandó un penalti al limbo

La maldición de Gonzalo Higuaín continúa. Si hace un año tenía un mano a mano de oro anteNeuer en la final del Mundial ante Alemania, la pasada madrugada ante Chile disfrutó de otra ocasión inmejorablepara sentenciar el partido en el último segundo y después mandó al limbo su penalti en la tanda que a la postre haría campeón a Chile.

En una de las pocas ocasiones que tuvo Messi para darse la vuelta, el jugador del Barcelona obró un contragolpe, cedió a Lavezzi y éste envió un pase a un Gonzalo Higuaín, que con poco ángulo, mandó el balón a la red. No era un balón fácil pero esos goles son los diferencian a los delanteros ínclitos. Pero lo peor estaba por llegar para el jugador del Nápoles. Tras el tanto deMessi en el primer lanzamiento de Argentina en la tanda, el ariete cogió el esférico para intentar materializar el segundó, pateó y lo mandó a las nubes. No es fácil reponerse de situaciones así.

Es tan obvio que Higuaín es una goleador sobresaliente como que en los momentos importantes, ya sea por la tensión o por simple casualidad, se hace pequeño. Los números confirman estas dos teorías. Con el Real Madrid anotó122 goles en 264 partidos(números devastadores) pero aún se recuerda su falló clave en los cuartos de final de la Champions League de la 2009/2010 ante el Olympique de Lyon. Ahí, el argentino falló una clara ocasión ante Lloris y otra sin portero que mandó al palo.

Tras marcharse al Nápoles y ser recibido como un héroe en Italia, Higuaín ha seguido cuajando unos números excelsos. En104 partidos con el equipo napolitano ha anotado 53 golespero también se recuerda su falló ante la Lazio. En el último partido de la pasada Serie A, donde el conjunto de Rafa Benítez se juagaba la clasificación para la Champions League, el Nápoles se puso 0-2 perdiendo y el argentino empató con un doblete. Con empate a dos tantos en el marcador, volvió a tener la oportunidad desde los once metros pero la mandó al limbo. Es el mal de Higuaín, fallar en los momentos importantes.