Para darse cuenta de la fractura que existe en la escudería McLaren-Honda solo hay que ver las declaraciones de Yusuke Hasegawa, jefe de Honda Racing, y Éric Boullier, director deportivo de McLaren, tras el Gran Premio de Australia. Honda se mostró "satisfecha con los progresos" tras el abandono de Alonso y el puesto 13º de Vandoorne, mientras que McLaren aseguró que "hay muy pocos motivos para estar contentos".
Otro cruce de declaraciones que no arregla nada y del que Alonso tiene que sacar en algo en claro: en su MCL32, ni funciona el motor Honda, ni el diseño del chasis, la suspensión y el sistema electrónico de McLaren.
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Durante toda la pretemporada en Montmeló, McLaren acusó a Honda de la pésima potencia del motor del MCL32, una acusación cierta, pero que sería legítima si todos los problemas del monoplaza radicasen en el motor.
"Alonso hizo una carrera impresionante exprimiendo un coche dañado", afirmó Éric Boullier tras el Gran Premio de Australia.
El máximo mandatario de McLaren en la Fórmula 1 quiso homenajear a sus dos pilotos, Alonso y Vandoorne, después de una carrera en la que todo lo que falló había sido diseñado por McLaren, y no por Honda.
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El motor es un desastre. Alonso fue adelantado por Ocon y Hulkenberg como si fuesen dos aviones a su lado dada la escasa velocidad punta del coche. Sin embargo, por una vez, el motor fue fiable y aguantó durante todo el fin de semana. Esta vez los fallos vinieron de Woking, poniendo de manifiesto que McLaren no está preparada para ganar como afirmaron sus dirigentes en pretemporada.Los frenos, la suspensión y la electrónica lastraron a los pilotos
A falta de tres vueltas para el final de la carrera, Fernando Alonso comentó por la radio que su MCL32 tenía problemas. La respuesta del equipo fue rápida e indicó al asturiano que se fuese directo a 'boxes'.
El abandono se confirmó y Alonso explicó tras el Gran Premio que el coche había tenido "problemas de suspensión".
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No solo fue eso. El propio Boullier reconoció que desde el principio de la prueba el coche sufrió "una avería en el freno delantero izquierdo", algo que convirtió en heroica la carrera de Alonso. Finalmente, el suelo del McLaren "se rompió irremediablemente", provocando el abandono. Falló la suspensión, el freno y el suelo, componentes obra de McLaren.
La factoría de Woking también tuvo todo que ver en los problemas de Vandoorne. El debutante hizo una tempranera visita a 'boxes' en la que tuvieron que reiniciar el sistema electrónico del coche. El tablero electrónico del belga, que le informa de los cambios de marcha, había dicho basta.
Con la falta de potencia del motor Honda y los constantes fallos en el monoplaza diseñado por McLaren, la temporada se prevé muy dura para Fernando Alonso.
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