Portugal tiene "cuentas pendientes" con España y Francia

Óscar Tomasi

Lisboa, 22 jun.- La selección portuguesa de fútbol afrontará el próximo miércoles las sextas semifinales de su historia en un torneo oficial ante la vencedora del España-Francia, dos rivales con los que tiene "cuentas pendientes".

La clasificación de Portugal tras su triunfo contra República Checa (1-0) preside hoy la actualidad informativa del país, y son varios los medios lusos que preguntan al público qué contrincante considerarían más fácil de cara a la próxima fase.

Tanto los jugadores lusos como el seleccionador, Paulo Bento, ya anticiparon nada más acabar el duelo que no tienen preferencia ni por España ni por Francia, a priori ambas incluidas en la lista de favoritas para el triunfo final en esta Eurocopa.

Sin embargo, en muchas de las breves entrevistas realizadas a aficionados lusos emitidas por varios canales del país se desprende una ligera preferencia por enfrentarse a sus vecinos españoles.

La Roja fue precisamente el verdugo de Portugal en el último Mundial, en 2010, cuando un gol de David Villa -ausente en esta edición por una lesión que lo ha dejado en el dique seco durante varios meses- acabó con sus esperanzas de superar los octavos de final.

El tanto del delantero del Barcelona dejó muy "tocado" el ánimo del combinado nacional luso, y una de las imágenes del partido fue sin duda la de Cristiano Ronaldo, cuando al ser interrogado por los periodistas sobre los motivos de la derrota se limitó a contestar con un lacónico "pregunten a Queiroz", seleccionador entonces.

El conjunto de las "quinas" se tomó una pequeña revancha en un amistoso disputado cinco meses después, en noviembre de 2010, cuando pasó por encima de una irreconocible España para acabar ganando por un abultado 4-0.

Mayor es, sin embargo, la lista de "agravios" con Francia, ya que los "bleus" han sido los responsables de alejar a Portugal de tres finales, en los años 1984, 2000 y 2006.

Precisamente el actual presidente de la UEFA, Michael Platini, fue el autor del gol definitivo de los franceses en las semifinales de la Eurocopa de 1984, disputada en su país, y que llegó cuando sólo faltaba un minuto para terminar una prórroga que acabó 3-2.

Dieciséis años después, en la Eurocopa de Bélgica y Holanada, la Francia de Zinedine Zidane volvió a hundir a una Portugal en cuyo equipo figuraban ya estrellas como Luis Figo y Rui Costa.

Las "quinas" se adelantaron en el marcador gracias a un tanto del delantero centro Nuno Gomes, pero Thierry Henry en la segunda mitad y Zidane en la prórroga acabaron por firmar la victoria de los "bleus", que también superarían a Italia en la final para coronarse finalmente como campeones.

El segundo tanto francés llegó de un discutido penalti cometido por el defensa Abel Xavier que todavía es recordado en tierras portuguesas.

En aquel conjunto militaba el actual seleccionador luso, Paulo Bento, que fue sancionado con seis meses de inhabilitación para disputar competiciones organizadas por la UEFA por haber agredido, supuestamente, a un juez de línea después de recibir el tanto de la derrota.

Abel Xavier y Nuno Gomes también fueron castigados con nueve y ocho meses, respectivamente.

El mismo guión se repitió hace seis años, en el Mundial de Alemania de 2006, cuando en su equipo coincidían un Figo en sus últimos años y un Cristiano Ronaldo que empezaba a emerger.

Los portugueses superaron su fase de grupos con suficiencia, ganando a sus tres rivales (México, Angola e Irán), y consiguieron eliminar también a dos de las "grandes", Holanda e Inglaterra, en octavos y cuartos, respectivamente.

Sin embargo, Francia volvió a actuar de 'justiciera' una vez más, con Zidane de nuevo como ejecutor, ya que suyo fue el tanto de penalti que borró de un plumazo las esperanzas lusas.

Los "bleus" perdieron aquel campeonato en los penaltis ante Italia después de que el propio "Zizou" fuese expulsado por un cabezazo al italiano Marco Materazzi.

Hoy mismo, Nuno Gomes aseguró en declaraciones a la radio lusa Renascença que tanto España como Francia son dos "excelentes adversarios difíciles de vencer", y recalcó que los "bleus" utilizan un estilo de juego "más parecido al de Portugal".

"Esperemos que nuestra selección dé su mejor nivel y acabe por llegar a la final", aseveró el hoy futbolista del Braga, uno de los jugadores de aquella Portugal que acabó por perder, en 2004, la final de la Eurocopa contra Grecia.