El exfutbolista español Carles Puyol devolvió hoy el trofeo de campeón mundial que España ganó hace cuatro años en Sudáfrica y lo entregó en el Maracaná antes de la final que jugaron Alemania y Argentina.
Puyol llegó vestido de traje negro escoltado por la modelo brasileña Gisele Bündchen, anduvo unos pasos hacia el césped, levantó el trofeo ante una ovación y aplausos del público y lo depositó en un pedestal.
Antes de salir al césped, el exfutoblista Zico y el alemán Bastian Schweinsteiger se acercaron a hablar al exdefensa del Barcelona.
Puyol dijo hoy, en una entrevista a la web de la FIFA, que prefiere que Lionel Messi se proclame campeón mundial, aunque señaló que tanto Alemania o Argentina merecen el título.
El exdefensa de la selección española y del Barcelona recogió el testigo en dicho cometido del italiano Fabio Cannavaro, quien fue el encargado de presentar el trofeo en el Soccer City de Johannesburgo antes de la final entre España y Holanda.
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