Rafael Cabrera entierra sus opciones con un nuevo mal comienzo

Juanjo Baena

Casares (Málaga), 20 may.- El golfista español Rafael Cabrera Bello ha "enterrado" hoy, con un nuevo mal comienzo, sus opciones de jugar la final del 47 Volvo World Match Play Championship, al perder (por dos hoyos) con el norirlandés Graeme McDowell.

Rafael Cabrera tuvo ante Graeme McDowell, al igual que en las dos rondas anteriores, con el sueco Robert Karlssson y el español Álvaro Quirós, unos comienzos muy por debajo del nivel de su rival, lo que le lastró en su rendimiento final, pero en este caso no pudo culminar su reacción.

Así, en los cuatro primeros hoyos, McDowwell había logrado una cómoda renta de tres por encima.

Rafael Cabrera, poco a poco, comenzó a encontrar su regularidad y en los cinco hoyos siguientes logró tres "birdies" y un par que dejaron la desventaja en mínima para el norirlandés.

Un mal hoyo (el 11) de Rafael Cabrera y un "birdie" -el cuarto hasta entonces- del norirlandés volvieron a poner la diferencia en dos. Pero McDowell "pinchó" en el siguiente con un "bogey" que aprovechó el español.

El quinto "birdie", ya en el hoyo 13, de McDowell volvió a ponerle otra vez con dos por encima, lo que obligó a Rafa Cabrera a esforzarse y a recurrir a su competitividad y fuerza mental para, tras igualar en el 14 y 15, meter un "birdie" en el 16 que le pusieron a las puertas de la proeza. No ocurrió así porque el par (en el 17) y, sobre todo, el "bogey" (en el 18) fueron determinantes.

La final la jugarán Graeme McDowell con el belga Nicolás Colsaerts, que doblegó al escocés Paul Lawrie. En los 18 hoyos se produjo la igualada, lo que conllevó al desempate que se decantó en el segundo hoy para el belga.

En la otra semifinal, entre Paul Lawrie, ganador del pasado año del Abierto de Andalucía, y el belga Nicolás Colsaerts, el escocés también cobró pronto ventaja -que pareció insalvable- ya que en los primeros cinco hoyos cobró una renta de cuatro por encima, con tres "birdie", ante un rival que reaccionó en los hoyos 8, 9 y 10, con un par y dos "birdies".

Los tres siguientes hoyos fueron igualados (par, doble bogey y par), y el 13 y el 14 supusieron la remontada del jugador nacido en Bruselas con sendos "birdies", para empatar la confrontación, aunque un "bogey" en el 16 la frenó.

Los dos últimos hoyos fueron de gran emoción, con empate (par en el 17), y "birdie" (18) para el bruselense que forzó el desempate.

Segundo en el Abierto de China, Colsaerts culminó su proeza de remontar ante un sólido Lawrie, en el desempate en dos hoyo, para jugarse el título con McDowell.