Robben puede ganar la Champions antes que Florentino Pérez

"En el mundo real las cosas son así. Si viene Kaká, se va Wesley Sneijder, y si viene Cristiano Ronaldo, se va Robben". Estas declaraciones las realizó Jorge Valdano, director general del Real Madrid, en el verano de 2009, cuando el club español reventó el mercado de fichajes con una inversión de 250 millones de euros. Con el brasileño y el portugués llegaron Xabi Alonso, Karim Benzema, Raúl Albiol… Florentino Pérez regresó a lo grande a la presidencia del equipo blanco con el objetivo de ganar su segunda Champions tras la de 2002 con el gol de Raúl González y el golazo de Zinedine Zidane al Bayer Leverkusen.

Para pagar este desembarco de estrellas, fue necesario vender a otras. Valdano logró colocar en el mercado a más de una decena de futbolistas por un valor cercano a los 100 millones de euros. 25 de esos 'kilos' llegaron gracias a la venta al Bayern Múnich de Robben, la única gran promesa electoral cumplida por el anterior presidente, Ramón Calderón.

La salida del holandés fue polémica porque parte de la afición no quería que se fuera y tampoco el entrenador Manuel Pellegrini, que se encontró en plena pretemporada sin varios jugadores (el otro fue Sneijder) con los que contaba para la competición. El extremo pelado, de hecho, ya se había mostrado como un futbolista muy útil... cuando las lesiones se lo permitían.

Tampoco quería irse del Real Madrid Robben, pero al final fue empujado por el club, necesitado de millones para pagar fichajes y salarios de los nuevos. El holandés peleó por quedarse, pero acabó cediendo y marchándose enfadado a Múnich, al Bayern, tradicional enemigo de los blancos en Europa.

Con los alemanes, va a disputar su segunda final de la Champions en tres años. La primera la perdió ante el Inter de Milán de José Mourinho, actual entrenador en el Santiago Bernabéu, pero ante el Chelsea puede lograr el título que tanto ansía Florentino, la 'Décima', y que tres años después no ha traído a las vitrinas del club.