Sergio Ramos, Víctor Valdés, Iraizoz, Hemed, Pabón y Martins

Roberto Morales

Madrid, 3 mar.-

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-- SERGIO RAMOS

Era un clásico sin trascendencia clasificatoria pero un impulso moral necesario antes de que el Real Madrid juegue otra 'final', en Old Trafford ante el Manchester United, y Sergio Ramos decidió no perdérselo. Hubo una época pasada en la que se cansó de infiltrarse porque sintió que nadie se lo reconocía tras una bronca con Bernd Schuster. Para estar ante el Barça se pinchó y sus molestias en la clavícula desaparecieron.

Ramos estuvo en todas las acciones que marcaron el clásico. Robó el balón que sirvió a Morata para la asistencia a Benzema. Se confió en el marcaje a Messi y el argentino aprovechó un metro para empatar. Y remató con el alma el cabezazo que dio el segundo triunfo en una semana del Real Madrid ante el Barcelona. Su beso al brazalete de capitán que tanto siente es una seña al madridismo. Unido a la hora de la verdad, cuando está en juego convertir la temporada en éxito o fracaso.

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-- VÍCTOR VALDÉS

Su imagen protestando airadamente al colegiado Pérez Lasa y dejando quejas que le costarán partidos de sanción tras ser recogidas en el acta, representa la imagen de la desesperación de un Barcelona que no encuentra su identidad y que deambuló por el Santiago Bernabéu reduciendo la brillantez de su fútbol a un juego de toque sin profundidad, presión ni desmarques.

El Barcelona tuvo una oportunidad única de recuperar la autoestima ante un Real Madrid de suplentes y acabó desesperado. Valdés salvó con sus paradas a Cristiano una derrota mayor y a 80 metros vio claro el penalti de Sergio Ramos a Adriano que encendió al barcelonismo en el último segundo del duelo. Nadie puede dudar de Víctor, que ya ha anunciado al club que no seguirá, y en el que puede ser su último clásico lo cerró con una imagen de queja desmedida.

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-- GORKA IRAIZOZ

El puesto de portero es el de más confianza del entrenador de fútbol. No suele admitir cambios a mitad de temporada y cuando llegan dejan señalado al guardameta sustituido. Iraizoz lo sufrió en el Athletic Club de Bilbao y ha sabido levantarse con fuerza.

Marcelo Bielsa le retiró la confianza y cedió ante la presión pública. Errores de Iraizoz habían costado puntos. Su nivel no era distinto al de sus compañeros en una irregular temporada pero fue castigado con el banquillo. En el Reyno de Navarra regresó al once y se reivindicó. El triunfo que da aire al técnico que le sentó nació en sus intervenciones a Kike Sola y Puñal.

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-- TOMER HEMED

Comenzó la temporada con papel de protagonista principal, enchufado al gol y destapándose como uno de los delanteros revelación cuando el Mallorca de Joaquín Caparros asomaba por puestos europeos. Tan solo le superaban en número de goles Leo Messi, Cristiano Ronaldo y Radamel Falcao. Palabras mayores.

Su perdida de protagonismo tuvo gran parte de culpa del bajón del equipo. Doce jornadas consecutivas sin marcar para un futbolista que perdió su ángel y hasta la titularidad. Regresó a tiempo para devolver la esperanza al Malloca y dar el primer triunfo en la nueva etapa de Gregorio Manzano en la isla. Desde el 18 de noviembre, en Vigo, no marcaba Hemed. Su tanto condujo a la victoria en Granada.

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-- DORLAN PABÓN

Tras convertirse en el primer futbolista colombiano que hace un gol en la historia del Real Betis, Pabón le ha cogido gusto y explotó sus virtudes en Anoeta para firmar un doblete clave en el empate ante la Real Sociedad.

Tras brillar en la Copa Libertadores 2012 con el Atlético Nacional, el Parma no dudó en pagar 4 millones de euros por un futbolista rápido y con pegada. Llegó cedido al Betis, con una ansiedad de brillar en sus primeras apariciones que ha conseguido apaciguar. Con la calma llegan los goles y se destapa como el complemento perfecto al goleador Rubén Castro. Pabón ya brilla en España. En un fútbol que le va como anillo al dedo.

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-- OBAFEMI MARTINS

Es un trotamundos del fútbol. Un goleador que nunca ha establecido su hogar en ninguno de los equipos en los que ha jugado. Martins dejó su huella en el Inter de Milán, Newcastle, Wolfsburgo, Rubin Kazan y Birmingham antes de recalar en el Levante.

Se acopló con rapidez al fútbol español y sus goles hicieron olvidar con rapidez a Arouna Koné, futbolista clave para que el Levante esté disfrutando esta temporada de una histórica participación europea. El dinero llama a la puerta de Martins que quiere marcharse a mitad de campaña al Seattle. Su precio es 3 millones de euros y el perjudicado de la situación es su actual club. Fue suplente en Mestalla y su aparición fue clave para el empate final. Su cabeza debe estar en quien le paga antes de iniciar un nuevo viaje.