El 1 de abril de 2017 el mundo conocía el busto que preside el Aeropuerto Cristiano Ronaldo. La estatua de la cara del futbolista del Real Madrid creada por el artista luso Emanuel Santos dio la vuelta al mundo... por su escaso parecido.
"Es imposible agradar a griegos y troyanos. Ni siquiera Jesús agradó a todos. Es una cuestión de gusto, no es tan simple como parece. Vi obras de artistas que siguen este parámetro. Lo que interesa es el impacto que genera la obra", se defendía el escultor luso.
Cristiano Ronaldo y su hermano dieron el visto bueno, pero no la opinión pública, aunque la fama le vino bien a Santos ya que para la final de la Champions League de Cardiff le encargaron hacer un busto sobre Gareth Bale.
Su obra preside el aeropuerto internacional de Madeira, tierra natal de CR7, pero la escultura seleccionada por el Real Madrid para el museo del club lleva la firma de un escultor español.
El andaluz José Antonio Navarro Arteaga, de 52 años, ha hecho justicia al futbolista blanco con un busto aplaudido por la crítica y que cuenta con un parecido mucho más razonable que el de su predecesor.
José comenzó a realizarlo por el amor a los colores blancos de su hijo, quien le pidió que hiciese una “versión buena” de Cristiano después de ver la escultura del aeropuerto.
El artista sevillano, que tiene entre sus obras más reconocidas el monumento funerario a la Duquesa de Alba, se ha negado a desvelar el coste de una escultura que ya se ha ganado el favor del público.
Prueba de su buen hacer es que Emilio Butragueño haya posado ya con el busto, el mismo que se instalará en el museo del Real Madrid para que todos los fans puedan hacerse una foto con el crack portugués, aunque no sea de carne y hueso.
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