La entrañable historia de Bron Burrel, que a los 72 años vuelve a correr un rally con su Austin Maxi

  • Esta británica compitió por última vez en 1970 cuando tenía 25 años, entonces vendió el coche para buscar un trabajo y ahora regresa a la competición.

    Ha comprado su antiguo coche, lo ha reparado y participará en el Rally de Londres a Lisboa para completar más de 3.300 kilómetros.

Bron Burrel vuelve a pilotar su Austin Maxi
Bron Burrel vuelve a pilotar su Austin Maxi
BBC Mundo
Víctor Gil
Víctor Gil

La última vez que Bron Burrell pilotó un Austin Maxi tenía 25 años y era una joven aventurera que completó los más de 25.000 kilómetros del Rally Maratón que unía Londres y México por todo tipo de caminos, ríos, desiertos, selvas y montañas. Corría el año 1970 y a pesar del paso del tiempo, sigue con vitalidad para volver a pilotar.

Bron Burrel tiene 72 años y se ha reunido con su copiloto Tina Kerridge-Reynolds, de 77, con la que participará en un rally desde Londres hasta Lisboa que se celebrara en el mes de abril. Lo harán con el mismo coche que utilizaron hace casi cinco décadas, ya reparado y al que conocían como 'Puff The Magic Wagon'.

"Tengo de nuevo mi licencia de competición y estoy lista para el 'rock and roll'", dijo Burrell, que no cree que las peronas mayores no puedan conducir un coche: "Pienso que conduzco muy bien, tengo que controlarme, porque tiendo a querer ir más rápido de lo que debería. Siento deseo de velocidad", añade.

Burel rememora que tuvo "la suerte de conocer a Jim Clark (expiloto británico de automovilismo), que me enseñó a conducir un Lotus Cortina en el circuito de Brands Hatch (Londres). Me senté en el coche, le observé y le dije: 'Jim, es genial, pero tú puedes ir más rápido, ¿verdad?".

Comenzó a pilotar coches de rallys en 1960, toda una adelantada a su tiempo: "Usábamos vestidos antes de la carrera, pero nos poníamos cómodas para conducir. Pantalones vaqueros o cosas así. Por supuesto, entonces no había ningún tipo de seguridad. Fue sólo una aventura". Recuerda que "competíamos en Rallys de cinco días en los que solo dormíamos una noche".

Una vez que llegó a completar el rally, regresó a Inglaterra y tuvo que dejar el mundo del automovilismo para buscar un trabajo con el que poder ganarse la vida, ya que por entonces las competiciones no daban dinero. Entonces vendió el coche, pero ahora ha conseguido recuperarlo y lo ha puesto a punto para que "no nos deje tiradas".

Su gran objetivo es llegar a la meta superando los más de 3.300 kilómetros, porque en esta vida los límites solo se los puede poner uno mismo: "Todo el mundo piensa que estoy loca por hacer esto a mi edad, pero realmente siento que tengo unos 50 años".

Mostrar comentarios