El Villarreal alcanza su cuarta semifinal europea tras darse un festín en Praga

El Villarreal vapuleó al Sparta de Praga (2-4) en la vuelta de los cuartos de final de la Europa League, en un encuentro en el que el viento se puso de cara con celeridad al conseguir una rápida renta y en el que una defensa checa de circunstancias hizo aguas, frente a un 'submarino' que se postula como uno de los favoritos en el campeonato.

El absoluto dominio castellonense de los 90 primeros minutos de la eliminatoria no se plasmó en el marcador y dejó con vida al conjunto checo, al que un solo gol le metía en 'semis'. Sin embargo, Bakambu abrió el camino en los primeros instantes con una renta tempranera, a la que se sumó un festín goleador de sus compañeros para adentrarse en unas semifinales europeas cinco años después, las cuartas en su historia.

Con el graderío local aún frío, el Villarreal se obcecó en sentenciar la clasificación cuanto antes, recordando al guión puesto en marcha en la ida, aunque en esta ocasión dieron muestras de la pegada que atesoran por costumbre. Así, Bakambu se encargó de resolver en los instantes iniciales en una contra, tras una fuerte arrancada para plantarse mano a mano ante el arquero, una de sus especialidades.

La ventaja puso la ronda muy encarrilada para los españoles, que a partir de entonces centraron sus esfuerzos en proteger la meta de un Areola que volvió a la titularidad europea. Los locales, con todo su arsenal ofensivo de inicio, merodearon la portería de un 'submarino' que pretendió pausar el juego, precavido ante el surgimiento de posibles tintes de remontada.

Perforar las redes de la segunda escuadra menos goleada de la Liga BBVA no fue tarea sencilla, ya que los checos se toparon con un muro que apenas dejó una rendija de entrada. El Sparta se desesperó ante un entramado trazado a medida y pagó cara la disposición de una zaga plagada de novedades por obligación. El experimento fue aprovechado a la perfección por el cuadro amarillo, que dio la sensación de que marcó cuando quiso.

En cuanto aceleró su ritmo, el Villarreal rompió su saco de goles minutos antes de la entrada a vestuarios. Primero Castillejo, tras un contragolpe de libro, y después Bruno, en un saque de esquina con ayuda de Lafata, pusieron tierra de por medio en una eliminatoria decidida antes de disputarse la mitad definitiva.

Los de Marcelino, que controlaron la situación en todo momento, siguieron con la misma tónica a la reanudación, poniendo Bakambu la puntilla con su noveno tanto en la competición, reafirmándose como uno de los hombres más en forma de ésta.

El duro castigo en el marcador dio pie a que los españoles no hurgaran en la herida local, mientras que los checos fueron capaces de maquillar el resultado en un final con escaso misterio. De esta forma, los jugadores de Zdenek Scasny lograron marcar dos tantos de la 'honra' para alegría de la grada, que a pesar de la derrota pudo regresar del estadio con la cabeza alta por su participación continental. Dockal y Krejni fueron los anotadores del Sparta, que concluyó el choque asediando el arco amarillo.