Vuelta a España 2012: Contador se lleva una de las mejores ediciones de la ronda española

Decir que esta Vuelta a España es de las mejores de la historia quizá sea quedarse corto, o quizá sea no decir nada. A quien no la haya visto le será difícil imaginarse el nivel de ciclismo que todos los aficionados al deporte de la bicicleta han podido disfrutar durante tres semanas. Alberto Contador, Joaquim Rodríguez y Alejandro Valverde han ofrecido un espectáculo único y difícil de repetir. Y no sólo los ciclistas han elevado esta carrera a la categoría de histórica. El recorrido, digno de una de las tres grandes 'boucles', y la cantidad de aficionados que la han seguido, han hecho de esta Vuelta a España una prueba que trasciende el tiempo y que será recordado para siempre.

Lo malo, pensarán muchos, es que esto ya ha acabado y que sólo puede haber un ganador. Al final llegó el final, como diría Sabina, y fue Contador, como se preveía, el que se enfundó el maillot rojo en Madrid. Era el favorito en Pamplona allá por el 18 de agosto, pero pocos podían imaginar que tuviera que sufrir tanto para llevársela. Tuvo que emular a grandes mitos del ciclismo como Merckx, Hinault o Anquetil para poder hacerse con su quinta 'grande'. Todo por culpa de 'Purito' y Valverde, dos ciclistas sobresalientes.

Quizá lo que más sorprendiera es que Contador no ganar más holgadamente en una carrera diseñada para un escalador como él. Hasta diez llegadas en alto ofrecía esta edición de la Vuelta en la que sólo había una contrarreloj y en la que los 'montañistas' estaban llamados a tener su oportunidad. El pinteño se Saxo Bank venía para ganarla y para volver a disipar las dudas sober el dopaje que rondaban sobre su persona.

'Purito' no suelta el maillot rojo

Empero, las primeras llegadas en alto no favorecían madrileño. Fueron puertos cortos y tendidos en los que era difícil sorprender a los rivales y en lo que Joaquim y Alejandro hicieron gala de su velocidad final para ganar las primeras diferencias gracias a las bonificaciones. Incluso Chris Froome, el único foráneo que podía colarse en la fiesta nacional, era capaz de aguantar a Contador.

Tras una primera semana de contacto, llegó la contrarreloj de Pontevedra. 'Purito' ejemplificó el dicho ciclista de que el maillot de líder da alas y en un ejercicio de sacrifico, superación y fuerza mental y física logró mantenerse al frente de la general por tan sólo un segundo. Después de aquella undécima etapa, los cuatro protagonistas estaban separados por menos de un minuto. Se empezaba a vislumbrar un final digno de hemerotecas.

El tríptico hace daño y Contador rememora viejos tiempos

Tras la prueba ante el crono, los corredores tenían que afrontar el tríptico de llegadas en alto de Asturias. Los puertos de Ancares, Covadonga y Cuitu Nigru eran las metas de tres jornadas destinadas a decidir esta Vuelta. Alberto Contador no se cansó de atacar durante los tres días pero 'Purito', en una muestra de su mejoría como escalador, era capaz de responderle a cada ataque. Con Valverde prediendo tiempo, todo apuntaba a que sería la Bola del Mundo la que decidiría quién ganaría y quién se tendría que conformar con el segundo puesto.

Empero, Contador no estaba dispuesto a apurar tanto. En una oda al ciclismo y en un homenaje al ciclismo de ante, el madrileño atacó camino a Fuente Dé cuando quedaban cincuenta kilómetros para la línea de meta. 'Purito' cometió su único error de toda la Vuelta y lo acabó pagando con el liderato. Incluso Valverde, más centrado en defender la tercera posición ante Froome, fue capaz de dejarle atrás y de arrebatarle el segundo puesto.

El ataque de 'Purito' en la Bola del Mundo no sirvió de nada porque tanto Contador como Valverde administraron la ventaja que tenían sobre él. El tercer puesto puede que le sepa amargo, pero éste no es un tercer puesto cualquiera. Quizá sea el tercer puesto más sufrido de todas las Vueltas a España. Pocas veces se ha visto un nivel tan alto y tan parejo entre los tres primeros de la general en la gran carrera por etapas española.

Contador, Valverde y 'Purito' pueden estar orgullosos de los que han hecho. Gracias a ellos las etapas de montaña de la Vuelta parecían del Tour de Francia por la cantidad de gente que se agolpaba en las cunetas para animarles. Gracias a ellos, la televisión ha batido récords de audiencia en las retransmisiones de ciclismo. Y, lo más importante, gracias a ellos el ciclismo, ese deporte casi muerto por la enfermedad del dopaje en España, ha ganado algo de vida en un país con tanta tradición sobre el deporte de las dos ruedas.

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