Ya ha pasado un año: del 'alcorconazo' a un equipo respetado y asentado en Segunda

  • ¿Alcorcón? Suena a desvío de la M-40, a polígono industrial o a terrenos para la Ciudad Deportiva del Atlético de Madrid... pero también a un equipo de fútbol que protagonizó una de las gestas deportivas más impactantes de la última temporada futbolística: la de eliminar al Real Madrid en la Copa.
El Alcorcón quiere repetir la machada copera frente al Athletic de Bilbao
El Alcorcón quiere repetir la machada copera frente al Athletic de Bilbao
Óscar Rodríguez

Pocos sabían hace ahora un año dónde estaba Alcorcón. Menos sabían aún que en esa ciudad había un equipo que militaba en Segunda División B. Y se contaban con los dedos de una mano los que apostaron por ellos cuando se enfrentaron al Real Madrid en la Copa del Rey. Un año después, el Alcorcón es un equipo profesional que juega la Liga Adelante, que casi ha triplicado su presupuesto y que se codea con los mejores equipos de la División de Plata del fútbol español.

El Alcorcón está viviendo, en palabras de su entrenador Juan Antonio Anquela, "un sueño que nos hemos merecido y que espero que dure mucho tiempo". En 365 días se ha transformado de un equipo semi-amateur de Segunda B con menos de un millón y medio de euros de presupuesto, a un equipo profesional de Segunda División, con más de cuatro millones de presupuesto y que es el orgullo de una población de casi doscientos mil habitantes limítrofe con la capital de España.

Han cambiado muchas cosas en este año. Hoy se miden al Athletic de Bilbao en la Copa del Rey como un equipo medio de Segunda del que nadie se fía. Hace un año, todo era diferente. Nadie conocía a un conjunto que vestía de amarillo y con el que las apuestas giraban en torno a los goles que el Real Madrid pudiera marcar. El 4-0 de aquel 26 de octubre de 2009 lo cambió todo.

"La eliminación del Real Madrid fue muy mediática, pero lo que de verdad ha transformado el club ha sido el ascenso. Ahora somos profesionales gracias a que jugamos en Segunda". Juan Antonio Anquela, Anquelotti como le llamaron aquellos días, tiene claro que el 'alcorconazo' dio fama al club, pero el ascenso les ha cambiado. "No es lo mismo visitar estadios de equipos que el año pasado jugaban en Primera División a los que nosotros nos encontrábamos en la mayoría de los campos de Segunda B".

La transformación es absoluta: no sólo se ha casi triplicado el presupuesto, si no que se ha remodelado la plantilla (sólo quedan diez jugadores de la pasada temporada), se ha doblado el número de socios y triplicado el de aficionados que acuden a Santo Domingo, pasando a más de 3.500 por partido desde los poco más de 1.000 del pasado año.

Como reconocen desde el club, la situación no tiene nada que ver: "el año pasado nos repartíamos 70.000 euros de Telemadrid entre los cinco equipos de la región en Segunda B. Este año, sólo por jugar en Segunda, recibimos 1.400.000 euros en concepto de televisión y quinielas".

El año pasado, un Real Madrid plagado de suplentes salió escaldado del coliseum amarillo. Esta temporada, el Athletic no quiere que le pase lo mismo y Caparrós ya ha anunciado que no se fía de los de Anquela. El entrenador del Alcorcón, pese a todo, sigue apostando por la misma forma de ver el fútbol: "ilusión y optimismo es algo que rondaba alrededor del club y que gracias a la eliminatoria contra el Real Madrid logramos incorporar a nuestra filosofía. Ahora, sólo nos queda disfrutar de cada noche porque nos lo hemos ganado".

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