12 claves que convirtieron a Botín en el mejor banquero del mundo

El patriarca Emilio Botín Sanz de Sautuola, presidente del Santander hasta 1986, solía decir que la banca era una institución muy democrática porque en ella primaba el mérito por encima del apellido, pero su sucesor fue su hijo y la de este va a ser su hija Ana Patricia Botín. Tampoco es una contradicción. Su hijo Emilio Botín logró convertir al Santander en el primer banco del mundo, mientras que Ana Patricia ha sido educada para dirigir el banco. La cualificación no se discute. Estas son las claves que han hecho de Botín, según la prensa internacional, uno de los banqueros más poderosos y respetados del mundo. Jaime Velasco Kindelán los desgrana en Emilio Botín y El Banco Santader, historia de una ambición (Conecta).

1. Saber anticipar el futuro del sector y las necesidades del mercado.

2. Formar buenos equipos: Impulsar las iniciativas adecuadas, y rodearse de un equipo muy competente para llevarlas a cabo.

3. Ganó casi todas las guerras: La de las Supercuentas, la subasta y adquisición de Banesto, la fusión con el Central Hispano, y la compra de Abbey National en el Reino Unido.

4. Visión a largo plazo: Ambiciosa estrategia de crecimiento en Latinoamérica.

5. Modernizador: Desde el minuto uno de su presidencia, e incluso algunos meses antes, Botín supo impulsar la modernización del banco.

6. Liderazgo indiscutible e indiscutido: La trayectoria del Santander es inseparable del liderazgo que imprime Botín, que exige a los suyos ser siempre los primeros y los mejores en cada mercado y cada línea de trabajo. Sin un presidente de su perfil, la historia hubiera sido muy diferente.

7. Capacidad de anticipación: Fue el primero en ver la oleada de competencia que imponía la entrada en Europa, lo que le llevó a dar el primer golpe y dar a sus adversarios un revolcón del que muchos nunca se recuperaron.

8. Decisiones eficientes y rápidas: Prever que la llegada del euro impondría una concentración bancaria en la que no fue el primero en actuar, más bien el más resolutivo con dos operaciones que le dieron el liderazgo nacional.

9. Buenos fichajes de directivos: haber sabido rodearse de los mejores directivos del sector sin que su autoridad como fuente última de autoridad en el banco fuera nunca discutida hasta su muerte.

10. Aprender de los fallos, que también los tuvo: Lucha por el poder en el BSCH, que duró varios años. Se unieron dos culturas bancarias muy diferentes, y probablemente por las prisas y la necesidad de mantener el secreto se fue a la fusión sin tenerlo todo bien atado. Tuvo que reaccionar a fondo para mantener el control. Banesto aportó al Santander una enorme red de sucursales, que tiraron del negocio los primeros años, pero que se en el escenario bancario del nuevo siglo se han convertido en un lastre. Al final, el Santander tuvo que absorberlo en 2012 con un alto coste de cierre de sucursales y despidos, algo que se podría haber hecho de forma menos traumática algunos años antes. No haber sabido o podido poner de su lado a un ejecutivo como Ángel Corcóstegui, que podía haber aportado muchos buenos momentos a la banca española y global del nuevo siglo.

11. Era uno de los mejor informados de España: Después del presidente del Gobierno, el era el español mejor informado, por lo que sus opiniones tenían un peso específico grande y era escuchado siempre con atención.