MADRID. EL AYUNTAMIENTO LEGALIZARÁ A LOS ‘OKUPAS’ DE VIVIENDAS SOCIALES SI LLEVAN MÁS DE UN AÑO

El Ayuntamiento de Madrid ha iniciado el proceso para regular a los ocupantes irregulares de viviendas de la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo (EMVS) siempre y cuando lleven más de un año y se pongan al corriente de sus pagos a la comunidad de vecinos, un proceso excepcional que se inicia en 88 viviendas y que “no significa que se llame a la ‘okupación’”.
Como explicó este martes la primera teniente de alcalde, Marta Higueras, el Consejo de Administración de la EMVS ha aprobado regularizar el estado de los ocupantes de viviendas sociales que carecen de contrato, y que han de demostrar que han convertido ese espacio en su hogar, así como que la ‘okupación’ no responde a un interés lucrativo.
Asimismo, deberán pagar las rentas devengadas y cuotas de comunidad, mientras que será requisito imprescindible no tener problemas de convivencia con el vecindario. A quien se haga dicha concesión, dispondrá de seis meses para cumplir con estas consideraciones y sólo podrá regularizar su situación si la ocupación irregular se dio antes del 1 de enero de 2016.
A las personas que se acojan a este proceso se les hará un contrato de alquiler social con la EMVS si no tienen “alguna otra propiedad”, por lo que la vivienda ‘okupada’ debe ser su lugar habitual de residencia. Higueras aclaró que los beneficiarios deben “cumplir las normas de convivencia” y demostrar “que no son conflictivos”.
“Tenemos algunas viviendas que nos constan quejas”, y en estos casos desde el Ayuntamiento “no lo vamos a consentir”, por lo que quienes hayan tenido problemas con los vecinos no podrán acogerse a este excepcional proceso. Para garantizar este punto, técnicos de la EMVS y servicios sociales del Ayuntamiento visitarán personalmente a los solicitantes.
QUEJAS DE LA OPOSICIÓN
Este proceso ha sido aprobado por el Consejo de Administración de la empresa municipal con los votos favorables de los representantes de Ahora Madrid y el PSOE, mientras que C’s y PP mostraron su rechazo a tal operación, pues consideran que incentiva que se ocupen viviendas de la EMVS de forma irregular.
Sin embargo, Higueras negó tajantemente que esta regularización favorezca la ‘okupación’, sino que supone regular la situación de “familias en grave necesidad” y que “tienen su arraigo”, llevando a cabo un “proceso de normalización”.