El grupo informático estadounidense Intel registró un beneficio neto en caída de 51% a 1.300 millones de dólares en el segundo trimestre, afectado por cargas de de reestructura relacionadas con la eliminación de 12.000 empleos anunciada en abril pasado.
Según resultados publicados el miércoles, el beneficio por acción, excluyendo elementos excepcionales, superó en 7 centavos la previsión promedio de los analistas, alcanzando 59 centavos.
El volumen de negocios aumentó por su parte 3% a 13.500 millones de dólares.
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