"Estamos de acuerdo con que de seis a nueve meses es un plazo razonable y nos marcamos este periodo de sesiones como objetivo, pero fijarlo en las normas podría ser objeto de recurso", ha señalado el portavoz parlamentario popular, Pedro Puy, quien ha aludido a que el reglamento parlamentario recoge con claridad que una comisión se cierra cuando acaban los trabajos o finaliza la legislatura.
Las principales enmiendas de los grupos de la oposición incidían, asimismo, en la "desestacionalización" de los trabajos --el socialista Abel Losada situó como fecha el año 2000, en la línea de los trabajos del Congreso, "o incluso antes", lo que permitiría "profundizar" en la época de gestión coincidente con los Gobiernos de José María Aznar y del Banco de España antes de 2004-- y en la ampliación del "objeto" de la investigación
Sobre este segundo punto, tanto Luis Bará (BNG) como Manuel Lago (En Marea) han incidido en la necesidad de profundizar en el "negocio redondo" de la venta de Novagalicia Banco. "Hay que saber quién fue el encargado de liquidar precipitadamente una entidad que recuperaba valor cuando ninguna norma obligaba a hacerlo y todo el mundo en Galicia decía que era un error", ha advertido Lago.
Puy ha replicado que los trabajos "ya están desestacionalizados" y ha añadido que ampliar el acuerdo contravendría el acuerdo inicial. También ha rechazado la petición de BNG y En Marea de que el dictamen tenga que ser aprobado por una mayoría reforzada y no simple, cuestión que el PP también ha rechazado al entender que "lo razonable" es que se incorporen las posturas discrepantes, si las hay, pero no que los grupos se quieran "reservar la capacidad de obstruir".
(HABRÁ AMPLIACIÓN CON FOTO)
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