LA OCU DENUNCIA QUE LA SOLUCIÓN DE VOLKSWAGEN AUMENTA LOS NIVELES DE NOX DE LOS VEHÍCULOS AFECTADOS POR EL ESCÁNDALO DE LAS EMISIONES

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) denunció hoy que la reparación propuesta por Volkswagen en los motores afectados por el escándalo de las emisiones empeora los niveles de óxido de nitrógeno (NOx).
La organización acaba de hacer públicos los resultados de unos test que, en colaboración con otras tres organizaciones de consumidores europeas (Altroconsumo, Test-Achats y Deco Proteste), ha llevado a cabo en uno de los modelos afectados por el escándalo de las emisiones, un Audi Q5 TDI 150 CV.
Según informó en un comunicado, estas pruebas se han realizado antes de ser llamado a revisión por parte del fabricante y justo después de ser retirado el software "engañoso" para analizar el impacto de la intervención por parte del fabricante en los motores afectados y comprobar si una vez retirado el software del vehículo mantenía los mismos parámetros que permitieron su homologación.
Sin embargo, la conclusión tras el análisis es que, una vez se ha eliminado el software en el taller oficial, el vehículo analizado emite un 13,2% más NOx en comparación con lo que emitía antes de ser llamado a reparar, situándose el nivel de emisiones un 25,3% por encima de los 180 mg/km que se establecen como límite en la normativa de homologación europea.
En cuanto a los datos de consumo, indica que las pruebas revelan que no existen diferencias significativas una vez eliminado el software engañoso. Sin embargo lo que sí se demostraría, según OCU, es que tanto antes como después de pasar por el taller oficial el consumo de combustible es hasta un 40% superior a lo que declara el fabricante.
NO LLEVAR EL COCHE AL TALLER
Por ello, la organización pide tanto a las autoridades de homologación como al Ministerio de Industria, Energía y Turismo que se revise “de manera exhaustiva” la solución técnica aportada por el Grupo Volkswagen Audi para reparar los coches afectados por el escándalo, a la vez que recomienda a los afectados que hasta que las autoridades no aporten una solución adecuada no lleven el coche al taller.
Por último, la asociación recuerda la “urgente” necesidad de implantar sistemas de homologación que midan todos estos parámetros de forma realista, “algo que solo puede producirse si los test de control de emisiones de los automóviles se hacen en condiciones reales de conducción y no en laboratorio” como ocurre con las pruebas de homologación europeas.