"Esperamos que en pocas semanas el resto de los migrantes que en este momento se encuentran en Costa Rica, que superan los 4.000 en los albergues, puedan llegar a su destino", dijo Solís a periodistas, luego de reunirse con su par guatemalteco Jimmy Morales, en el Palacio Nacional.
Costa Rica enfrentó una crisis humanitaria entre noviembre y diciembre cuando unos 8.000 migrantes cubanos se aglomeraron en su frontera con Nicaragua, luego de que el gobierno de ese país cerró el paso a los isleños, que usan el territorio de Centroamérica para llegar por tierra a Estados Unidos.
De acuerdo con Solís, desde que El Salvador, Guatemala y México aceptaron a principios de año servir como puente para que los cubanos continuaran la travesía, se ha evacuado a la mitad de los migrantes quienes se han costeado su boleto de avión y pasaje terrestre.
"Creemos que habrá condiciones para que todos ellos puedan salir de Costa Rica. Los migrantes están pagando sus costos de viaje pero quienes no puedan pagarlo estoy seguro que habrá formas filantrópicas de atender esa necesidad que tienen", agregó el mandatario costarricense, quien ha dicho anteriormente que el Estado no costeará a los cubanos ningún viaje.
"Quiero agradecer a Guatemala, El Salvador y México por haber facilitado un 'modus operandi' para el traslado de esta población en un ejercicio de humanitarismo puro", añadió Solís.
El presidente de Costa Rica cumple una visita de cuatro días en Guatemala que lo llevará a reunirse con los titulares de los poderes Legislativo y Judicial, y una visita al norteño departamento de El Petén, fronterizo con México y Belice, donde hará un recorrido por el sitio arqueológico El Mirador, entre otras actividades.
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