Ana Botín coge las riendas del Santander con decisión al mes de su debut

Madrid, 10 oct.- Ana Botín cumple hoy un mes al frente del Grupo Santander después del fallecimiento de su padre, un corto periodo de tiempo en el que no obstante ha iniciado la transformación tecnológica del banco y ha dejado claro que mantendrá la estrategia de la entidad, más ligada al cliente.

Aunque solo lleva un mes como presidenta del Banco Santander, Ana Botín, que ha asumido el cargo con decisión, y para el que se llevaba preparando toda su vida profesional, también ha comenzado a constituir su propio equipo, y ha establecido las principales líneas a seguir en el negocio de la entidad.

Incluso, en estos escasos 31 días, Botín, que ha estado sometida desde el primer momento al examen del mercado tras convertirse en la primera mujer en ponerse al frente de uno de los bancos con mayor peso en el panorama internacional, ya ha acordado la compra de la empresa de créditos al consumo canadiense Carfinco por unos 210 millones.

Tras su elección de forma unánime el pasado 10 de septiembre, una de las primeras cosas que hizo Botín, fue celebrar una reunión con los trabajadores del banco, un encuentro en el que animó a la plantilla a estrechar la relación con los clientes -a los que según dijo- la entidad tenía que apoyar para hacer realidad sus proyectos.

La presidenta del Santander espera que el grupo financiero sea el mejor para los empleados, clientes, accionistas y el conjunto de la sociedad.

Y ello, sin llevar a cabo cambios en la estrategia de la entidad, según ha dejado claro en varias ocasiones.

Su primera intervención como presidenta del grupo fue cinco días después de fallecimiento repentino de su padre, Emilio Botín, ante la Junta extraordinaria de accionistas, convocada en principio sólo para aprobar una ampliación de capital para comprar el 100 % de su filial brasileña.

En su discurso, Botín, que lanzó un mensaje de confianza, fue tajante y aseguró que la estrategia de la entidad será "de continuidad, la misma que ha hecho del Santander uno de los bancos más grandes y con más éxito" del mundo.

Una estrategia para la que Botín contará con su propio equipo que ya ha empezado a formar con el nombramiento de tres nuevos directivos, de los que dos, trabajaron con ella en Reino Unido; Javier Maldonado y Víctor Matarranz.

El primero será director de la nueva dirección general de Control y Coordinación de Proyectos Regulatorios, mientras que Matarranz ha sido designado como nuevo director del gabinete de presidencia.

David Gutiérrez Cobos completa los cambios al pasar ahora a ser director adjunto de la división Santander Universidades.

En esta nueva etapa que ha comenzado el Santander con Ana Botín, el grupo deberá adaptarse a un nuevo entorno, ha asegurado la presidenta, que ha insistido en que la tecnología está cambiando el mundo y la banca tiene que adaptarse a ello.

Por ese motivo, la entidad instalará wifi en algunas de las oficinas del Banco para que pueda ser utilizado por los clientes, una iniciativa con la que espera hacerse con la clientela más joven.

Durante este mes como presidenta del banco, Botín también ha tenido tiempo para reunirse con clientes y empleados de las distintas divisiones regionales de la entidad, y mostrar la apuesta del grupo por España.

Encuentros que según el banco, también ayudarán a reforzar los lazos institucionales de la entidad con las comunidades autónomas.

En uno de esos encuentros, Botín se entrevistó con la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ante la que reafirmó la colaboración entre ambas entidades.

Este mes, el Banco Santander también ha vendido el 2 % de su filial polaca, el Bank Zachodni WBK, y según ha anunciado, está considerando, junto con sus socios Warburg Pincus y General Atlantic, integrar su gestora de activos Santander Asset Management con Pioneer Global Asset Management, filial de la entidad italiana UniCredit.

Una operación que aún no se ha concretado.