Autoridades suspenden a militares por agredir a mineros en el sur de Honduras

Tegucigalpa, 4 oct.- El comandante de una unidad militar en el sur de Honduras y otros oficiales y soldados han sido suspendidos luego de que varios de los uniformados agredieron a mineros de la zona, informó hoy una fuente oficial.

El jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, Fredy Díaz, dijo a periodistas que han sido suspendidos oficiales, entre ellos el comandante del Regimiento de Caballería Blindada, Reynaldo Márquez, y varios soldados, mientras se investiga el caso, que fue denunciado por uno de los mineros agredidos.

Agregó que habrá castigos, relevos y sustituciones en la unidad militar que funciona en el sureño departamento de Choluteca.

El incidente se registró el jueves en la mina Cuculmeca, municipio de El Corpus, cuando los obreros pretendían ingresar, pese a estar resguardada por seguridad tras la muerte en julio pasado de ocho mineros que quedaron atrapados en su interior.

Según mineros de la zona, otros once quedaron atrapados tras el derrumbe a inicios de julio, sin que hasta ahora hayan sido rescatados, aunque los servicios de socorro han retomado las actividades para extraer los cuerpos, en un trabajo difícil y lento por la fragilidad del terreno.

Medios locales difundieron imágenes en las que se ve a dos militares que tienen sometido en el suelo a uno de los mineros, al que le han cubierto el rostro e intentan darle a beber agua sucia en una bote de plástico.

En el hecho, según el denunciante, participaron unos ocho soldados, aunque según las autoridades fueron solamente tres, que figuran entre los suspendidos.

El comandante de la 110 Brigada de Infantería, Benedicto Chicas, expresó que no sabía del hecho hasta que vio las imágenes publicadas en medios de comunicación, y que desde entonces se ha iniciado una investigación del caso.

Las autoridades no han precisado detalles del incidente que ha sido repudiado incluso por las mismas autoridades locales.

El jefe del Estado Mayor castrense reiteró que no serán tolerados los abusos de ningún elemento de las Fuerzas Armadas contra civiles y que de haber responsabilidad en el hecho denunciado, habrá incluso "destituciones definitivas", lo que ya ha ocurrido en otras ocasiones.