Banco Ceiss y Unicaja sellan un plan para crear el tercer grupo de cajas

Valladolid, 16 mar.- Los Consejos de Administración de Banco Caja España-Duero (Ceiss) y Unicaja Banco han aprobado hoy su nuevo plan integración, que pasará porque el primer banco adquiera el 30 por ciento del segundo y cuya culminación creará el tercer grupo de cajas del país.

La nueva entidad contará con unos elevados niveles de solvencia y confirma la aspiración de avanzar en el proceso de consolidación del sistema financiero español, según han informado hoy ambos bancos en un comunicado conjunto.

Para alcanzar estos objetivos, el plan económico financiero prevé que el Banco Ceiss (como ha pasado a llamarse ahora el de Caja España-Duero) emita 475 millones de euros en bonos convertibles contingentes.

Estos bonos, denominados en el argot CoCos, los comprará posteriormente el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB 3), ofrecerán un 8 por ciento de interés y tendrán un plazo de devolución de ocho años, siempre que la entidad tenga la suficiente solvencia para ello, según han explicado a EFE fuentes del Banco Ceiss.

Entre otras medidas, se prevé el mantenimiento de los 525 millones de euros en participaciones preferentes que Banco Ceiss tiene ya concedidos por el FROB, en virtud de la fusión que materializaron ambas cajas castellanoleonesas.

La garantía de estos 1.000 millones de euros corresponde exclusivamente a Banco Ceiss, según dicho comunicado conjunto.

Por su parte, Unicaja Banco tendrá abierta una línea de disponibilidad de obligaciones convertibles desde 375 millones de euros y hasta un límite de 1.025 millones de euros.

Este nuevo plan supone modificar el contrato de integración y avanza en la definición concreta de la estructura de integración, que se realizará mediante el traspaso de todo el negocio y depósitos de clientes a Unicaja Banco, bajo cuya garantía quedarán los mismos.

El grupo Unicaja/Ceiss tendrá unos activos totales aproximados de 80.000 millones de euros y un volumen de negocio bancario de 120.000 millones de euros.

El nuevo grupo tiene una implantación principal en las Comunidades Autónomas de Castilla y León y Andalucía.

El plan parte del principio básico de garantizar la máxima solvencia posible para el proyecto, mediante el objetivo de mantener una ratio de capital principal superior al 10 %, y ello aún después de reforzar de manera significativa las provisiones para posibles deterioros futuros de activos.

Según han dicho a EFE fuentes del Banco Caja España-Duero, el reparto de consejeros del nuevo banco no variará por el momento, 5 serán provenientes del Banco Caja España-Duero, y 10 de Unicaja, mientras que el presidente previsto seguirá siendo Braulio Médel, tal como se acordó en el primer acuerdo entre ambas cajas, y el consejero delegado Evaristo del Canto.

El proceso de fusión entre Caja España-Duero y Unicaja se aprobó el pasado 26 de septiembre y el retraso en su terminación se debe tanto a la complejidad de la operación como al nuevo marco de saneamiento del sector financiero estipulado el 3 de febrero a través de un decreto-ley, según explicó en su día el presidente de Caja España-Duero, Evaristo del Canto.

Este decreto obliga a la banca a cubrir en unos 52.000 millones de euros más su exposición al riesgo inmobiliario.

Esto supone que Caja España-Duero requiera 1.140 millones de euros, mientras que Unicaja 691 millones de euros.

Este nuevo acuerdo está adaptado a las nuevas exigencias derivadas de los cambios en los marcos regulatorios, las nuevas condiciones internacionales para el sector financiero y la propia evolución del entorno económico, según el comunicado.